E D I T O R I A L

Mañana nosotros

Mientras se mantiene la salud no hay preocupaciones puesto que todas las funciones corporales “trabajan adecuadamente” pero cuando aparece la enfermedad, todas las condiciones cambian por las diversas y variadas etiologías. Con ello aparecen signos y síntomas, molestias, dolores, trastornos, pérdida de la autonomía o incluso de la conciencia que llevan a buscar una solución (cuando la hay) por medio de medicamentos o terapias el equilibrio que se ha perdido. Por otro lado, no solamente se trataría de resolver las incomodidades físicas, también (y es muy importante no perderlo de vista) la atención espiritual. El cariño, la escucha, los signos de amor, ayuda y comprensión que se les debe dar a los enfermitos es fundamental para su recuperación, o al menos, para ofrecerles en medio de las penalidades: confianza, consuelo, paz y aceptación. Entraremos en una semana donde se trabajará para decirle a la sociedad que en solidaridad hay que ayudarlos puesto que el día de mañana nosotros podremos estar en su lugar. Nuestro reconocimiento a todo el personal sanitario, nuestra disposición para quien está enfermo.

I N T E R – N O S

Grupo Prende

Ya que hablamos de llevar consuelo a los más desprotegidos, desde aquí una merecida calificación al grupo Prende, perteneciente a la Catedral Metropolitana. Desde hace unos años a la fecha, dicho grupo juvenil trabaja para llevar un poco de calor en el frío diciembre. En el “Pollotón 2011” repartieron en las faldas del Cofre de Perote cuatro mil quinientos pollos, mil quinientas cobijas, dulces y juguetes. Hay que aclarar: no toda la juventud está perdida. Gracias jóvenes y sigan esforzándose.



De fiestas

Desde el inicio de año aparecen las fiestas patronales en diferentes localidades veracruzanas. Una cosa es la fe de los feligreses que se manifiesta con las actividades litúrgicas y otra diferente es la alegría que se externa con diversas actividades ¿recreativas? No necesariamente una lleva a la otra pues hay gente que acude por el baile, las bebidas espirituosas o por lastimar a los animales. Distingamos una cosa de otra.



Tierra de nadie

Desde luego que todos tenemos derecho de libertad de expresión, pero ¿hasta dónde debe llegar? ¿Puedo manifestarme a costa de los demás? ¿Qué decir de la tragedia ocurrida en un campo de futbol en Egipto, o de la presencia de los 400 pueblos en Xalapa o de las manifestaciones de grupos religiosos que más que proponer, atacan?

XX Jornada Mundial del Enfermo

POR DIEGO E. TÉLLEZ OJEDA


En medio de nuestra sociedad secularizada, en la que se da la ausencia de valores humanos y religiosos, muchos han perdido la esperanza de rencontrarse con un mundo mejor, sí esto pareciera algo utópico, ya no creen en  milagros;  en unicornios,  en los fantasmas o en los Santos Reyes.

Sin embargo, la razón nos enseña que Dios ha establecido libremente las leyes de un mundo físico y que, por tanto, puede modificarlas, hacer excepciones en las mismas o suspender su curso, dando pie a un mundo ideal, a una vida digna, cualquiera fuese nuestra condición, y respetada por los demás, no importando raza, género o color.

Por tal razón, el próximo 11 de febrero estaremos celebrando la XX Jornada Mundial del Enfermo, donde el tema a reflexionar será «¡Levántate, vete; tu fe te ha salvado!», ligado al próximo «Año de la fe», que comenzará el 11 de octubre de 2012, en el que S. S. Benedicto XVI nos invita a participar de esta ocasión propicia y preciosa para redescubrir la fuerza y la belleza de la fe, así también para profundizar sus contenidos y para testimoniarla en la vida de cada día.

El mensaje del Papa, se presenta muy alentador, sin embargo no tanto para quienes día a día se encuentran luchando por su vida, aquellos que se encuentran hospitalizados en lugares donde a menudo no reciben la atención que merecen, lo mismo para quienes parecen ser una carga a sus familiares o han sido abandonados en medio de la enfermedad, y por qué no, a quienes en el silencio y en su labor cotidiana atienden a nuestros enfermos, buscando de ellos la salud, ya no solo física sino del alma en un mundo donde se ha perdido el interés por el otro. Ante esta realidad, con motivo de la XX Jornada Mundial del Enfermo, Benedicto XVI expresó: “Deseo animar a los enfermos y a los que sufren a encontrar siempre en la fe un ancla segura, alimentada por la escucha de la palabra de Dios, la oración personal y los sacramentos, a la vez que invito a los pastores a facilitar a los enfermos su celebración. Que los sacerdotes, siguiendo el ejemplo del Buen Pastor y como guías de la grey que les ha sido confiada, se muestren llenos de alegría, atentos con los más débiles, los sencillos, los pecadores, manifestando la infinita misericordia de Dios con las confortadoras palabras de la esperanza”.

Por ende, a  todos los que trabajan en el mundo de la salud: doctores, médicos, enfermeras como también a las familias cristianas que cotidianamente tratan con enfermos, se debe  poner mayor empeño en  el trato a estos,  llevando este mensaje esperanzador a cada uno de ellos, no viéndolos como una  carga, o excluyéndolos de nuestra sociedad, sino haciendo ver a  cada enfermo que es   una persona con la  misma dignidad y  derechos que por su naturaleza le han sido otorgados.



Los enfermos, una opción vocacional



Entrevista a la Hna. María Elena Córdoba, Franciscana de la Inmaculada Concepción.



POR JUAN FERNANDO LUNA MELCHOR




¿Por qué dedicarse a los enfermos?

En primer lugar porque Jesucristo enviado por Dios para salvarnos dedicó mucho tiempo y espacio a los enfermos, por otro lado San Francisco a ejemplo de Cristo dedicó tiempo a los leprosos, el enfermo que menos era atendido por la sociedad de su tiempo y que menos posibilidades de una atención tenía.

En segundo lugar nuestro fundador Fray José del Refugio Morales Córdoba, encomendó a las tres primeras hermanas de la congregación el visitar a los enfermos de los hospitales civiles y acompañarlos en lo espiritual.



¿Cómo es que llegó a ser enfermera?

Porque mi superiora me dijo que debía tener una carrera, aunque mi ilusión eran las misiones, y pues opté por la que creí que era más fácil y más rápida: la enfermería; al final resultaron cinco y no tres años como pensaba; cuando tuve la oportunidad de ir a las misiones en África me di cuenta de que hay médicos nativos y otros que proceden de Cuba, pero no alcanza la atención y por eso nosotras recibíamos hasta 70 personas a consulta al día en una de las casas.

Cuando vi eso dejé de resistirme a estar en el hospital.



En todo este tiempo que se ha dedicado a los enfermos, ¿cuál ha sido su mayor satisfacción?

Ha sido increíble ver especialmente a los enfermos terminales con una gran esperanza y lucha por seguir viviendo, brindarles acompañamiento espiritual, es grato verlos después de la Reconciliación.



En la relación con los enfermos aparte de la necesidad de restablecer la salud física ¿qué otras necesidades les acompañan?

Necesidad de sentirse amados, de sentirse personas; los enfermos pasan por el proceso de no querer la enfermedad por eso no se tratan, no van al médico, no  quieren saber que están enfermos. Después viene una etapa renuente de reclamo a Dios, a la vida. Luego llega el momento de la asimilación y empieza a adquirir la paz, por lo que hay que identificar en qué etapa están para de ahí acompañarlo.

La familia también pasa por algo similar, piden al médico que les diga que eso no está pasando en su familia, sin embargo cuando el enfermo acepta la enfermedad, también la familia.



La enfermedad es parte de la naturaleza humana ante esto ¿qué decirle a las personas cuando pasan por este momento no grato?

Lo primero es darnos cuenta que somos seres propicios a la enfermedad y aunque la publicidad nos quiera hacer creer que no nos vamos a enfermar ni envejecer, es algo que aún no podemos superar todavía, ante esto es necesario darse cuenta de la presencia de Dios, no ver la enfermedad como castigo o como abandono. Si se está enfermo no vivir la enfermedad alejados de Dios sino fortalecerse en la fe y por otro lado reconocerse acompañados en esta experiencia de dolor.



Agradecemos la disponibilidad de la hermana María Elena Córdoba, al presentarnos de este modo una de las realidades a la que está expuesto todo ser humano.


FOTÓGRAFO: POR JOSÉ RICARDO RODRÍGUEZ



Ofrecemos a nuestros lectores el horario en el que algunas parroquias de la Arquidiócesis de Xalapa oficiarán el sacramento en favor de los enfermos, esperando le sean de gran ayuda a las personas que lo necesiten.




¡Bienvenido! Aquí te sanaremos

POR ERNESTO MARTÍNEZ ROJAS


ESTO YO NO LO SABÍA…

POR ANDRÉS SORCIA FUENTES

El Papa Juan Pablo II instituyó el 11 de febrero de 1992 La Jornada Mundial del Enfermo. La fiesta de la Virgen de Lourdes fue la adecuada para reconocer ante la iglesia católica dicha jornada, siendo este día en el que se exhorta a encomendar las oraciones y actos litúrgicos por el proceso de dolor que llevan en su vida los enfermos. Es así que en nuestro país se recuerda con mucho aprecio esta fecha.

…PERO AHORA YA LO SÉ

Frase de la semana

“Mente sana en cuerpo sano”

Juvenal

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