CONCILIO

E D I T O R I A L

Cultivar y arrancar

En este tiempo que llamamos Cuaresma, se nos propone una revisión de vida, aceptar los errores y las tendencias hacia el mal para ir por el camino de la conversión en vista a una vida mejor, acorde con los orígenes de la humanidad. Esta cuaresma se convierte en una oportunidad de cambio, de dejarse interpelar, dejar la autonomía personal y ser capaces de reconocer que necesitamos de Alguien para no perder la meta trazada. Aquello que rija nuestra vida será lo que nos indica qué hacer y qué dejar, ¿a quién elegimos? ¿a Dios o a las creencias mágicas? o ¿se coquetea con ambos? Cuando uno descubre la Verdad, desde la razón y desde la realidad (y no de manera subjetiva o parcial) es fácil la elección. Volviendo a la Cuaresma: una buena propuesta para vivirla y sacar provecho de ella es establecer un punto para trabajar, le recomendamos empezar por la familia: ¿cuáles son los valores y riquezas que se deben cuidar, regar y cultivar? ¿cuáles son las malezas necesarias para arrancar porque la están debilitando, marchitando y secando? Sin duda, una gran labor y mientras más afán le pongamos, mejor resultado obtendremos. 

I N T E R – N O S

¿Qué falla?

En esta semana nos encontramos en un crucero de la ciudad a una niña, de unos doce o trece años de edad, vendiendo cigarros a los automovilistas, a las nueve de la noche. Fue verdaderamente triste pensar ¿qué hacen quienes le compran los cigarros? ¿qué hace su familia? ¿qué hace la autoridad? ¿qué hago yo porque eso no ocurra? Lo peor del caso es que puede quedar en el pensamiento y buenas intensiones. ¿Cómo podemos ayudar? Contáctenos.

¿Qué falla?

Nos han llegado las noticias sobre los disturbios y muertes de los centros penitenciarios de readaptación social de Torreón, Apodaca y Honduras. En sí un ambiente más que difícil y si no tiene las condiciones materiales para lograr su cometido pues… esos resultados. El gobierno ha externado infinidad de veces que la familia es el lugar donde se fundamentan los valores para forjar ciudadanos de bien, de ahí a que se pase a acciones concretas, pues…

¿Qué falla?

Cuando aparecen ofensas contra la fe cristiana no se hace algún reclamo que indique la gravedad del asunto, en cambio, los talibanes se están movilizando después de la quema del Corán por parte de soldados extranjeros. ¿Qué falla? ¿llevar una fe al extremo? pero si hay convicción ¿por qué no defender lo que uno profesa? ¿y los cristianos?

¡Mi familia está en peligro de extinción!

POR: RICARDO MORALES PÉREZ

            En la actualidad se ha vuelto común ver familias desintegradas, hijos rebeldes y  padres violentos, lo cual denota la crisis familiar por la que está pasando la sociedad. Muchas son las respuestas que salen a relucir al preguntar acerca de la disgregación familiar, todas ellas apuntan a distintas formas de ver la realidad, pero, a fin de cuentas, cada quien tiene en su poder no sólo el saber que origina la problemática, sino el hacer algo por mejorar las relaciones entre hijos, padres y esposos.

Es por eso que el siguiente sondeo trata de expresar aquello que está fallando en las familias, aquello que todavía se puede corregir con el esfuerzo de todas las personas.

 ¿Qué cree que afecta la integridad de la familia?

 Que los niños a muy temprana edad se interesan más por la tecnología que por la comunicación con sus padres, es decir, ya no se acercan tanto a ellos para establecer una relación mutua. “Karina Berenice Zaragoza Córdova”

La falta de amor y de comunicación, el que los miembros de la familia estén separados,  que no haya estabilidad por parte de las cabezas familiares. “Leticia Blanco García”

 La carga de trabajo que existe actualmente y que afecta a los padres,  así como la pérdida de valores que enfrentan los niños en su educación, indiscutiblemente ese es el eje rector de la desunión familiar. “Jorge Alemán Gómez”

 La falta de valores morales, éticos y religiosos, la poca convivencia que existe en los matrimonios, esto es algo muy importante que se debe cuidar, también es necesario cimentar los valores desde pequeños a los hijos, dando siempre ejemplo de ellos. “Fidel Rivas Hernández”

 En primer lugar creo que afectan las infidelidades entre los esposos y en segundo lugar el aspecto económico, pues realmente estamos pasando una crisis terrible, los pleitos suscitados en la familia se deben a las carencias económicas. “Agustina Hernández Gamino”

La falta de integridad en las familias se debe a la ausencia de valores, los cuales se están perdiendo dentro del mismo núcleo familiar, porque tanto papá como mamá se va todo el día por la necesidad de sustento, de vivienda, ropa, en fin, de todo lo que se necesita en un hogar y se abandona mucho a los hijos. Por otro lado, tampoco los maestros están contribuyendo responsablemente en la educación de los hijos y por lo mismo hay más rebeldía hacía los padres. “Mireya Alarcón Durán”

FOTÓGRAFO: POR LUIS ALBERTO SORCIA

Yo defiendo a mi familia

POR JOSÉ LUIS ALVARADO JÁCOME

Hablar en estos tiempos sobre la familia resulta más complicado que vivirla porque mientras cada quien tenga su propia experiencia, al mismo tiempo se pretende unificar millones de realidades. Lo cierto es una cosa: en el fondo hay una esencia de la familia que no podrá cambiar aunque se acepten y hasta legalicen otras más. Se ha atacado al “modelo tradicional de familia” compuesto esencialmente por papá, mamá, hijos y demás familiares. Se ha dicho que “eso ya está pasado de moda, que pertenece a un bloque macizo e impenetrable, que es el blasón de las añejas instituciones, que limita y ahoga a los integrantes”, pero surgen varias preguntas: ¿a quién le debemos la vida sino a nuestros progenitores, un padre y una madre? ¿qué nexos se forman entre los padres y los hijos? ¿somos capaces de reconocer esa relación gracias a nuestra capacidad racional? Encontramos que la familia es una comunidad, un grupo de personas que unidas por lazos como lo son el genético, el amor, la cercanía, la ayuda y la protección se reconocen y conviven.

Por familia también se entiende la convivencia y el compartir de la vida en la madre o el padre solteros con los hijos, los abuelos con los nietos, los tíos con los sobrinos o incluso los casos de adopción, donde no existe un lazo sanguíneo pero se sustituye por los del amor y la mutua correspondencia. Que, a decir verdad, en otros hogares, esto último brilla por su ausencia; de ahí el sufrimiento de algunos de los integrantes ante los desmanes, irresponsabilidades y agresiones ocurridas en el seno familiar. Aunque hay factores externos negativos que desfiguran al amor de la familia, no por ello cambia su esencia, que ha acompañado a la humanidad desde sus inicios.

No deberíamos caer en el juego de la postmodernidad que nos va indicando desechar “los antiguos modelos” para implantar “nuevos paradigmas” acordes a nuestros tiempos, porque “ya basta de imposiciones, ahora que cada quien elija lo que quiera”. Se trata de humanizar más nuestro entorno, no de volverlo hostil a la vida y al amor. Nos han mostrado a México como una sociedad que tiene su centro en la familia, pues ¡defendamos aquello que somos! Tal parece que ahora ir contracorriente es vivir como buenas personas.

En estos tiempos de crisis económica y social es de vital importancia revalorar nuestro entorno en que nos desarrollamos, a nuestros familiares, a nuestra familia. No cambiemos el oro por los espejitos. Lejos de las nuevas tendencias donde se prohíbe hablar de responsabilidad y compromiso, hagámoslo nosotros, preocupémonos de nuestra familia y compartamos el tiempo que Dios nos permita vivir.

FOTOGRÁFO: POR DIEGO E. TÉLLEZ OJEDA

¿Qué pasa con el primer viernes de marzo?

POR JOSÉ LUIS MORALES CHÁVEZ

El primer viernes de marzo se lleva a cabo el festival anual de brujos en Catemaco, Veracruz. Se dice que asisten más de 100 brujos “profesionales” a esta reunión que ya tiene más de 30 años de antigüedad.

Miles de personas van para tratar de solucionar problemas de salud, mejorar sus negocios, posición política o las relaciones amorosas. También hay algunos que buscan un hechizo para dañar o incluso matar a sus oponentes. La práctica más popular es una "limpia", una ceremonia pequeña para aliviar al sujeto de los malos espíritus. Además se realiza la famosa “misa negra” hacia la medianoche del jueves, acompañada por pentagramas ardiendo y la masacre de pollos negros.

Ya desde la época prehispánica se señalaba el primer viernes de marzo como el más importante del año debido a la lluvia de estrellas que carga de energía y quita las malas vibras. Y era interpretado  como una oportunidad  para dar gracias por lo recibido y pedir más para el futuro.

Por su parte, la Iglesia Católica respeta algunas de las tradiciones que datan de épocas prehispánicas y reconoce los valores curativos de las plantas, sin embargo no aprueba la brujería ni la hechicería ni la adivinación. Para la Iglesia, las personas que curan con hierbas  son gente que tiene conocimientos, desde épocas pasadas, sobre las plantas y su valor medicinal; por ello está a favor de que se conserven. Pero las “limpias” para quitar supuestamente las malas energías son supersticiones que le dan un valor a cosas que no lo tienen.

Todas las prácticas de magia (blanca o negra), hechicería, amuletos y adivinación (horóscopos, astrología, quiromancia, interpretación de presagios y suertes, recurrir a “mediums” o brujos) tienen en su raíz un elemento en común: la idolatría. Estas prácticas utilizan medios ocultos pretendiendo domesticar potencias sobrenaturales para ponerlas a nuestro servicio con la finalidad de hacer el bien o, en el peor de los casos, el mal.

Hay idolatría desde el momento en que el hombre honra y reverencia a una criatura u objeto como si fuera Dios. Y precisamente esto sucede con este tipo de prácticas ocultistas.

Cuando te enteres que alguien está amenazado por brujerías debes procurar decirle que se acerque a los sacramentos, que intensifique su oración personal y que pida la oración de los demás, pero que nunca, nunca debe ir con otro brujo para “defenderse”. Porque si lo llegara a hacer caería en la trampa que el demonio ha tendido.

Ante todo debemos confiar en Dios, orar, hacer sacrificios espirituales y siempre abstenernos de buscar la ayuda de Satanás.

ESTO YO NO LO SABÍA…

POR CÉSAR JOEL MENDOZA SÁNCHEZ

Un año bisiesto dura 366 días, porque la tierra tarda 365 días con 6 horas en girar alrededor del sol, si cada cuatro años es año bisiesto, multiplicamos seis por cuatro, en total 24 horas es un día ese día se le agrega a febrero, en vez de los 365 de un año común corto. El adjetivo deriva del latín bisextus correspondía al 24 de febrero…

… PERO AHORA YA LO SÉ.

FRASE DE LA SEMANA

“Una familia feliz no es sino un paraíso anticipado”

John Bowring