CONCILIO

A propósito de contradicciones

por Casas

E D I T O R I A L

Las fiestas

Algunos dicen que la religión nos llena de sentimientos de temor y angustia. Otros dicen que son puras fiestas que nos alejan del trabajo y de una vida más preocupada por las cosas de este mundo. Esto último lo dicen, sobre todo, por el enorme puente Guadalupe-Reyes que hemos construido los mexicanos. A pesar de los problemas económicos, de la recesión mundial y de las bajas temperaturas, las peregrinaciones y homenajes a la Virgen de Guadalupe no han decrecido. Los mexicanos la queremos mucho. Es nuestra madre, la Madre del verdadero Dios por quien se vive, y su fiesta nos prepara también para la Navidad ya próxima. Pero también están las posadas, el gran invento de los misioneros, que tomaron los días dedicados a Huitizlopoxtli -el dios más horrible del panteón idolátrico- para hacer este pequeño drama donde José y el mesonero se enfrentan con argumentos que van y vienen y que, al final, todo se resuelve “en alegría y regocijo, porque hospedamos aquí a la Madre de Dios Hijo”. Nosotros, con exámenes y preocupaciones; pero las fiestas y nuestra próxima ida a casa hacen que estos días sean bonitos y alegres.

C O N C I L I Á B U L O

Un gran intelectual católico

En días pasados, ha muerto un gran intelectual católico uruguayo: Alberto Methol Ferré. No conocemos toda su obra, pero sí sabemos que su pensamiento tuvo un influjo decisivo en el llamado Documento de Puebla, o sea, en la redacción de las conclusiones de la III Conferencia del Episcopado Latinoamericano, reunida en la ciudad de Puebla de los Ángeles. Todavía hoy, este documento tiene una palpitante actualidad, por ejemplo, en lo que se refiere a la “invalente cultura universal” frente a nuestra realidad latinoamericana y a la religiosidad popular ante la religión de las urbes y muchos muchos temas más.

La “alienación”

Hay una palabra bíblica que tienen muchos significados y que estaba de moda en la época del marxismo: la alienación. ¿De dónde viene? De la Biblia, de la carta a los filipenses, donde dice que Dios se alienó a sí mismo y se hizo uno de nosotros (Flp 2, 8). El que la metió al vocabulario filosófico fue Hegel, cuyo sistema, según algunos, no sería más que un cristianismo secularizado: la idea se alienó y se hizo naturaleza y luego, progresivamente, se hace espíritu. Pero esto pasó al marxismo y en todo se veía alienación no nada más en la vida religiosa sino también en el trabajo. Pero la verdadera alienación para nosotros los creyentes es la del Hijo de Dios, que tomó nuestra naturaleza débil y mortal.

Los maestros son examinados

Como cada semestre, la Facultad de Filosofía “Rafael Guízar Valencia” hace su evaluación de los maestros; secreta, por cierto, pero muy detallada. Cada grupo otorga una calificación a sus diversos profesores junto con una gran cantidad de observaciones y sugerencias para mejorar las cosas. Todo esto se les dice a los maestros y se les entrega en una hoja especial, pero después de los exámenes que ellos mismos han aplicado para que estos puntos de vista no influyan en la apreciación que ellos hacen de los alumnos.

Nos vamos de vacaciones

Nos vamos de vacaciones luego de dar los exámenes. Hemos sabido que muchos se llevan sus libros o fotocopias de bibliografía porque tienen entre manos la redacción de sus tesis. Este año, los temas son muy variados: Teilhard de Chardin, Martin Buber, Bacon… y cuatro alumnos han escogido temas que tienen que ver con san Buenaventura y con el agustinismo en general, movidos, sin duda alguna, por la idea que hay de que Su Santidad Benedicto XVI es, en cierta forma, platónico en su filosofía. Por lo menos, dice muy claramente que él matizaría el famoso axioma tomista de que “nada hay en el entendimiento que no haya pasado antes por los sentidos”.

La Virgen de Guadalupe trae un mensaje de vida
(Entrevista al presbítero Gilberto Suárez Rebolledo párroco del Santuario del Dique)

por Carlos Ávila Gamino

En el marco de las fiestas guadalupanas, celebramos el 478º aniversario de las apariciones de la Morenita del Tepeyac, por esta razón, nos dirigimos al Santuario de Guadalupe en esta Ciudad de Xalapa -por cierto, el pasado 11 de diciembre cumplió 52 años como parroquia y el 8 de diciembre, 46 años como santuario-, para entrevistar al presbítero Gilberto Suárez Rebolledo, párroco de dicho lugar.

Al llegar nos encontramos con varias personas que peregrinaban hacia este recinto. Una vez que saludamos al padre Gilberto Suárez, nos dispusimos para charlar con él.

- Padre, sabemos que usted tiene poco más de dos meses en esta comunidad parroquial, ¿nos puede hablar acerca de su experiencia como pastor en este lugar? Con seguridad afirmó: “Primeramente, mi experiencia en esta comunidad es que hay mucha identidad de un barrio, socialmente hablando; este lugar no es ninguna colonia, fraccionamiento o unidad habitacional, sino que es un barrio. Segundo, hay mucha identidad en cuanto que es el centro de la fiesta guadalupana, ésta los ha identificado, los ha hecho un barrio con un cariño entrañable, que defiende mucho su entorno y sus territorios. Y, finalmente, hay tres figuras que considero han dejado huella: el padre Martín del Campo, que recuperó el santuario para la Iglesia de Xalapa, así se lo encargó Monseñor Pío López, primer Arzobispo de Xalapa; la presencia de los Jesuitas, inclusive, en la colonia Zapata dejaron una capilla para su patrón San Ignacio de Loyola; tercero, el padre Vicente Condado quien ideó y tuvo en las manos toda la construcción del templo, ellos han dejado una huella impronta en este lugar”.
Muchas personas visitan el Santuario de Guadalupe y para dar un buen servicio se necesita de una excelente organización. Los grupos parroquiales, movimientos, asociaciones, vecinos, gente voluntaria y el mismo barrio, ya traen una dinámica, simplemente el párroco se integra y coordina estas actividades. Nos explicó que las autoridades civiles, también colaboran con ambulancias, despliegues de policías, protección civil, Tránsito del Estado, el IPAX, salubridad y los medios de comunicación.

Si estas fiestas no sólo están reservadas a un grupo selecto, en este sentido, ¿cuál es el impacto social de dichas festividades?
“Considero que no es una festividad local, sino una festividad regional, en donde participan varios municipios como Xico, Teocelo, Banderilla, Alto Lucero, Actopan, Las Vigas, Perote, Tlaltetela, en general toda la Arquidiócesis de Xalapa. También tiene un impacto regional ya que hemos recibido peregrinos de Puebla, Chiapas, Tabasco, Campeche, Yucatán y Oaxaca. El Santuario da identidad hacia la fe guadalupana, pero sobre todo identidad cristiana”, afirmó. Otro aspecto del impacto social, que remarcó el padre Gilberto Suárez, es que las personas que visitan el santuario encuentren acogida y apoyo, ya que vienen en busca de un consuelo por toda la aflicción que provoca la carestía que se vive, la crisis económica, y la violencia. En este lugar ellos encuentran como un bálsamo, un oasis para toda esta dificultad que arrastran.

Padre, ¿cuál considera que es el mensaje central de la Virgen en la actualidad?
“Yo creo que hay muchos problemas en la sociedad al igual que muchos retos y desafíos, pero cuando las personas se agarran bien de Dios, y cuando tienen bien cimentado el amor a la Virgen de Guadalupe, encaran estos retos y dificultades con una actitud de mayor fuerza. Porque cuando la gente peregrina al Santuario de Guadalupe, se fortalece, confirma su fe y robustece su vida cristiana”.

Finalmente, el padre Suárez Rebolledo hace un llamado especial a todos los jóvenes, diciéndoles que la Virgen de Guadalupe trae un mensaje de vida, y que todo su potencial, fuerzas, arengas y vigor deben llevarlos a producir vida. Que no se dejen cautivar por la cultura de la muerte, los vicios, la prostitución, la violencia, la prepotencia, el consumismo, el placer, sino que se den cuenta que María de Guadalupe viene a decirles que está con ellos, cerca de ellos y que ella trae la vida para que la reciban.

Agradecemos al padre Gilberto Suárez Rebolledo por habernos concedido esta entrevista, esperamos que estas fiestas guadalupanas hayan dejado resultados satisfactorios para su comunidad parroquial.

Dos miradas sobre Juan Pablo II
por Elías R. Soto Córdoba

De entre lo publicado sobre Juan Pablo II existen dos libros sobre su vida y ministerio. El primero tiene como autora a Valentina Alazraki quien desde el año de 1975 es la corresponsal de Televisa en Roma cubriendo la fuente vaticana además de otros cargos. A ella le tocó narrar la muerte de Pablo VI, le elección de Juan Pablo I y Juan Pablo II, la muerte de estos dos últimos y la elección del actual Benedicto XVI. Como reportera le tocó acompañar a Juan Pablo II en sus viajes apostólicos a lo largo de todo el mundo logrando que el mismo Juan Pablo II la identificara como la “periodista mexicana”. Valentina con su ojo de reportera nos presenta una mirada externa sobre este gran Papa. El libro lleva como título “En nombre del amor. Juan Pablo II, memoria íntima de un hombre santo” de la editorial Planeta.

El segundo libro tiene como autor principal a Mons. Stanislao Dziwisz, quien conversando con Gian Franco Svidercoschi nos narra las etapas más significativas de la vida de Karol Wojtyla, desde su labor pastoral como Arzobispo de Cracovia hasta su muerte como Papa. Desde 1966 Karol le pidió a Stanislao que fuera su secretario personal y por ello la mirada que nos ofrece sobre Juan Pablo II es mas interna, sin tantos reflectores y cámaras.

Gian Franco es un periodista quien desde 1929 cubre la fuente vaticana y ha sido subdirector de L’Osservatore Romano y ayudó a Juan Pablo II en la redacción de “Don y Misterio”. El libro lleva como título “Una vida con Karol. Conversación con Gian Franco Svidercoschi” editado por La Esfera de los Libros.

Para quienes gusten de la lectura ligera se recomienda el libro de Valentina Alazraki; para quienes prefieran una lectura más aguda se recomienda el de monseñor Stanislao.

ESTO YO NO LO SABÍA…
La Inmaculada Concepción

por Moisés Martínez Martínez

Es el título que la Iglesia otorga a María y que lo expone a todo el mundo católico, con un juicio inefable, para ser creído. Fue declarado por el Papa Pío IX en su Bula Ineffabilis Deus, el 8 de diciembre de 1854. En ésta se dice: “La doctrina que sostiene que la virgen María, desde el primer instante de su concepción (…), fue preservada de toda mancha de pecado original ha sido revelada por Dios, y por tanto ha de ser creída firme e inviolablemente por los fieles”.

…pero ahora ya lo sé.

“Cuando al hombre se le pone como medida de todas las cosas, se le convierte en esclavo de su propia finitud”.

Juan Pablo II