CONCILIO

E D I T O R I A L

La inundación

La noticia principal para nosotros en la semana pasada fue la de la inundación. Una lluvia “atípica”, como dicen los encargados de Protección Civil. Los terrenos del Seminario están atravesados por un arroyo que viene de la colonia Veracruz y que en esta ocasión se desbordó de una manera que dejó sorprendidos a todos. Lo peor es que nos agarró de sorpresa, no nos dimos cuenta siendo una comunidad tan grande. Esto nos lleva a pensar en el descuido generalizado que hay, porque se tira al agua toda clase de materiales y se hace canal de desagüe hasta la corriente más límpida que habíamos conocido. Los ecologistas tienen mucho que decirnos y la Teología también, porque la creación de Dios se debe cuidar al máximo. Uno tiene que contar con los desastres naturales de la realidad creatural, sólo Dios es perfecto, pero si a todo eso añadimos la degradación y el descuido de los humanos, el mundo se puede volver inhabitable. Por lo pronto, tuvimos una buena tarea limpiando comedor, pasillos, oficinas y salones. Nunca nos había pasado; ojalá nunca nos vuelva a suceder.

C O N C I L I Á B U L O

No nos dimos cuenta

Luego del campeonato intenso y aguerrido, mientras la comunidad entera se encontraba en el comedor, las aguas lo invadieron todo. Esto nos recuerda lo que ya alguna vez habíamos dicho: el Seminario está construido en un terreno lacustre y los que entonces pensaron en su construcción no se dieron cuenta de que no era el sitio más apropiado para un edificio de varios pisos.

Después del Vaticano II

Si uno entra al rancho del Seminario, desde la puerta puede entrever lo que se antoja un símbolo de la Iglesia antes del Vaticano II y la Iglesia después del Vaticano II: por un lado, un gran edificio de 4 pisos, que necesitó un basamento de pilotes como el que tiene la Torre Latinoamericana de la Ciudad de México, y por otro lado, varias casas de un solo piso, donde bien caben 8 alumnos en cada una. Diríamos que aquí se echa de ver la problemática que en algunos países se agita tanto: ¿hay rotura o hay continuidad entre una y otra Iglesia? No se nos olvida que la segunda parte o casas más pequeñas fueron diseñadas por el arquitecto Mario Fernández de la Garza, cuyo talento es indudable.

Las “tesinas”

Con un italianismo, “tesina”, designamos el trabajo de investigación que filósofos y teólogos tienen que hacer hacia el final de sus cursos. No se espera que sea una obra sumamente original, sino un ejercicio para pensar y redactar por uno mismo luego de lo estudiado y entendido. Si uno lee el catálogo que hizo el padre José Rafael Luna Cortés, se dará cuenta de la enorme variedad de temas y de intereses que mueven a los estudiantes.

Las obras de Kant

Si uno trata de leer las obras de Kant, se encuentra con grandes dificultades de comprensión, comenzando por la distinta acepción que suelen tener los términos en su discurso. Y esto contradice violentamente los testimonios que tenemos de sus discípulos: según ellos, las clases eran apasionantes y hasta divertidas. Kant nunca había viajado, pero tenía un número enorme de libros de viajeros y bastaba ponerle un tema del Amazonas o de las Montañas Rocallosas para que de inmediato contara cosa interesantísimas al respecto. ¿Cómo se explica, pues, la enorme diferencia entre el Kant escrito y el Kant oral? Él mismo lo dice: “Aquí está lo esencial de la doctrina y no hay nada de adminículos didácticos porque, de lo contrario, los libros serían demasiado gruesos”. Esto indica qué es un maestro verdadero, el que ex-plica, es decir, desarrolla o desenrolla lo que estaba plegado o reconcentrado en las fórmulas de un libro o de una enciclopedia.

Ayúdame a ayudar
por Carlos Ávila Gamino

El próximo sábado 3 de octubre se llevará a cabo el “Día de la Caridad”, a cargo de Cáritas asociación civil, que se fundó desde 1991 en Jalapa, como organismo de la Iglesia Católica para servir a todas las personas, en especial, a los pobres y necesitados.
De tal manera, que Cáritas de Jalapa A. C., cada año solicita la ayuda económica para continuar con esta labor a favor de las personas de escasos recursos.
La organización, difusión y coordinación general, estará a cargo del equipo de Cáritas diocesana. La colecta se efectuará instalando puestos fijos en lugares comerciales de la ciudad, además de manera ambulante, es decir boteando en las paradas de autobuses urbanos y suburbanos, recorriendo unidades habitacionales, fraccionamientos residenciales, así como ir a algunas rancherías y pueblos.
Propiamente la operación de la colecta la llevarán a cabo todas las parroquias, con sus diferentes grupos, movimientos, apostolados, asociaciones y feligresía, además de personas de buena voluntad que se agregan a este trabajo.
Más de uno se preguntará en qué se utilizará esta aportación. A lo que se responde con una lista de necesidades que hay que resolver. A saber: la compra de medicamentos psiquiátricos, contra el cáncer y la leucemia; bolsas para diálisis, vitaminas; pago de transporte a enfermos, indígenas, migrantes; ayuda en pagos de servicios de primera necesidad: agua, luz, gas, víveres; becas para estudiantes en extrema pobreza; compra de alimentos, ropa, medicinas y todo lo necesario para los enfermos terminales y ancianos del albergue; compra de víveres: arroz, fríjol, azúcar, leche, sopa, sal para despensas, y gastos de administración.
Cáritas de Jalapa asiste a las personas en sus diversas necesidades, promueve la superación personal y familiar, comparte bienes y servicios para la mejorar la vida de las personas.
En manos de cada persona está ayudar a esta institución, no hay que dudar hacerlo. Una persona que comparte de lo que tiene, conocerá en plenitud la alegría de dar, a través de amar y servir al más necesitado.

“El derecho a la vida”
por Liliana Torres Cano

El pasado lunes 21 de septiembre de 2009, tuvo lugar, en el auditorio del Instituto Superior de Música del Estado de Veracruz, la conferencia que llevó por título “La vida es un derecho, su defensa, una obligación”, dentro del ciclo de conferencias “Eutanasia, ¿crimen o muerte digna?” impartido por el doctor Ramón Lucas Lucas, Legionario de Cristo, catedrático de Antropología filosófica y Bioética en la Facultad de Filosofía de la Universidad Gregoriana en Roma.
El punto principal de esta conferencia giró en torno a la vida humana, como valor inviolable ante las amenazas actuales que se presentan en forma de ataques sistemáticos a la defensa de la misma.
El valor de su vida, señaló, radica en el hecho de que el hombre es una persona humana y aseguró que ésta es una totalidad unificada compuesta de cuerpo material y alma espiritual. Por la parte material, dijo, el hombre está sujeto al espacio y al tiempo, se mueve sólo en el ámbito de actos materiales y su cuerpo es mortal. Por otra parte, respecto a su alma espiritual, realiza actos inmateriales, pues ésta no está sujeta al tiempo ni al espacio, y es inmortal. Sin embargo, subrayó, que ambos componentes tienen igual importancia y que no pueden contemplarse por separado.
Durante la conferencia el doctor Lucas aseguró que hablaría sólo desde el punto de vista filosófico; esto para poder entrar en diálogo con aquéllos que no comparten la fe católica y para demostrar una tesis con la que todos puedan estar de acuerdo, haciendo a un lado religión y fe.
En seguida el padre Ramón Lucas mencionó que a lo largo de la historia humana ha habido siempre formas tradicionales y permanentes de violencia contra la vida tanto de tipo natural como las provocadas por el hombre. Sin embargo, continuó, hay actualmente nuevas formas de violencia contra la vida, o bien, los mismos atentados pero con características nuevas; enlistó los siguientes: aborto, anticoncepción, técnicas de reproducción artificial, diagnósticos prenatales, eutanasia, ensañamiento terapéutico, delincuencia, narcotráfico, mafias, control demográfico, etc.
Todo lo anterior, sostuvo, se presenta en el hombre como una deformación de la conciencia humana cuyo origen se sitúa en una ceguera moral que le hace al hombre ver el mal como bien y el bien como mal, le hace incapaz de discernir un delito de un derecho y disminuye su facultad de juicio crítico. Esto, puntualizó, lo vemos plasmado en la sociedad bajo diversas máscaras: la justificación del delito en nombre de la libertad; la legitimación jurídica y legislación con leyes civiles como si los delitos fuesen derechos que el Estado debe reconocer a los ciudadanos; delitos programados de manera científica y sistemática; delitos realizados en nombre del progreso de la ciencia y la modernidad; deformación y perversión de la medicina; implicación y complicidad de los medios de comunicación social; así como la globalización.
El materialismo, el utilitarismo, el hedonismo, el consumismo, son signos evidentes de toda esta corrupción moral del hombre; la negación de la verdad objetiva, de verdades absolutas y el tachar toda certeza de inmadurez y dogmatismo hablan en el hombre de un relativismo tanto de tipo gnoseológico, -el cual le conduce al nihilismo, es decir, la negación de su humanidad y la pérdida total de identidad y sentido-, como el de tipo ético, - o degradación de la norma-, y ambos, señaló, representan el problema más hondo de nuestro tiempo respecto de la vida humana.
El ponente no quiso dejar a su público con un sabor de boca a pesimismo y manifestó algunos signos de esperanza. Para favorecer la cultura de la vida propuso: crear centros y movimientos de ayuda a la vida; un positivo desarrollo científico en el campo médico; nuevas formas de solidaridad así como sensibilidad contra guerras y un mayor equilibrio ecológico; comprometerse formando conciencias en la familia, el colegio, la sociedad; educar en valores como la sexualidad, fidelidad, procreación; promover centros de métodos naturales de regulación de la fertilidad, consultorios matrimoniales y familiares, centros de ayuda y acogida de la vida humana. En fin, propuso todo un replanteamiento de la jerarquización de valores del hombre donde se sitúe el ser sobre el tener, la persona sobre la cosa y la solidaridad sobre la utilidad.Lucas Lucas concluyó su ponencia declarando tres actos especialmente graves que atacan directamente la vida humana: la muerte del inocente (homicidio, legítima defensa y pena de muerte); aborto provocado y directo; y eutanasia.

El Libro de los libros

por Moisés Antonio Martínez

El mes de septiembre la Iglesia lo dedica a la Biblia. En la Arquidiócesis de Xalapa algunos han profundizado en el estudio de este Libro Sagrado. El presbítero Francisco Suárez González, licenciado en Teología Bíblica, por la Universidad Gregoriana de Roma, nos expondrá y ampliará el panorama sobre este Libro que es luz para nuestros pasos.
-Padre Francisco, ¿cree que hemos adelantado en el conocimiento de la Biblia, en el sentido de leerla, profundizarla, de relacionarnos y acercarnos a ella? “A lo largo de los siglos se ha dado un gran avance en el conocimiento y profundización de la Sagrada Escritura. (SE). Del siglo I-XII había un acercamiento ordinario: la vida de fe de los cristianos, la predicación y sus catequesis eran totalmente bíblicas. Los mismos monjes y religiosos se alimentaban de la lectio divina, la lectura meditada de las SE. De los siglos XII – XVI se restringió su estudio porque ya se empezaba a mal interpretar algunas cosas: se buscaba criticar a la Iglesia. Así, del siglo XVI – XVIII, se empieza a abandonar su lectura, de hecho llega un momento en que la ven como algo prohibido. A fines del siglo XIX la Iglesia siente la necesidad de volver a la SE: resurge el que se estudie, conozca y aprenda”. Afirma que en este sentido sí se ha adelantado en el acercamiento a la SE.
Puesto que este Libro Sagrado está al alcance de todos es necesario tener algunas herramientas para leerlo correctamente, no en un sentido literal directamente, sino saberla interpretar. Al respecto, el padre Paco, como se le conoce en el ambiente presbiteral, nos dice que para leer mejor la SE hay que acercarse a ella con una actitud de escucha y de compromiso; leerla también con el mismo espíritu con que fue escrita, y tener presente: “Si leemos la Biblia y hay cosas que no entendemos es bueno preguntar y acercarnos a aquellos que saben un poco más, porque si no podemos caer en el hecho de interpretarla a nuestra manera, de una manera literal. ¡Hay que tener cuidado!”
Con frecuencia vemos que este Libro compuesto por 73 libros es objeto de obsequio en eventos de índole religioso. Con este antecedente le preguntamos al padre: ¿No cree que la Biblia es, a veces, un libro de adorno? “Desafortunadamente la SE, en algunos momentos o acontecimientos, se ha tomado como el recuerdo de un evento, como la primera comunión o la boda. Es importante que vayamos tomando conciencia de que la SE debe ser el libro de cabecera para todo cristiano y gente de buena voluntad, porque es Palabra de Dios que indica el camino de salvación, ilumina la vida, da las pistas o elementos para interpretar las situaciones personales, familiares, económicas, sociales, y demás que se viven: es el alimento espiritual. Tenemos que rescatar esa importancia: la Biblia no es adorno, por algo recibe el título de Libro de la Vida”.
El padre Paco afirma que la SE realmente ilumina la vida, pues aunque fue escrita por hombres, que sólo son medios, presenta la Palabra de Dios. “Conforme tú vas leyendo la Biblia vas descubriendo cosas y vas viendo el mundo y las situaciones desde otra perspectiva. La SE va abriendo el panorama, por eso es palabra que ilumina la vida. No hay gente que en algún momento no haya hecho referencia a un texto bíblico”, concluyó.
Existen miles de libros que se han escrito sobre Dios a lo largo de la historia, pero la Biblia es el Libro por excelencia ya que su origen es divino. Son muchos los hombres que se han dedicado al estudio de la SE a lo largo de la historia, tal es el caso de san Jerónimo (340 - 420) que se ocupó de la traducción latina de la Biblia, y cuya memoria se celebra el 30 de septiembre. “San Jerónimo decía: La SE es nuestro alimento y nuestra vida. Lee con frecuencia y aprende lo mejor que puedas; que te venga el sueño mientras tengas el Códice en tus manos, y que la Página Sagrada reciba tu rostro vencido por el sueño”, y con esta frase el padre Paco concluye la entrevista.

Sólo una vez al Año

por Casas

“Buscando el bien de nuestros semejantes, encontramos el nuestro”.
Platón