Domingo 19 de octubre de 2008

Plana semanal del Seminario Arquidiocesano de Xalapa, Ver. MÉXICO
Desde el año 2000
Aparece los domingos en el Diario de Xalapa



E D I T O R I A L

Nuestro santo


Hay muchos santos en la Iglesia de Dios, pero nosotros tenemos nuestro santo: san Rafael Guízar Valencia, misionero por antonomasia. No sabemos cómo habría tomado el concilio, las muchas reformas litúrgicas y la renovación que se ha dado, pero imaginamos que lo habría hecho bien, porque era muy obediente al Obispo de Roma. En su tiempo, fue un misionero con un estilo propio y característico que llegaba al corazón, y quienes lo oían no lo podían olvidar. Esta semana lo recordamos, de manera especial, con todos los fieles que le guardan una profunda devoción.




Museo de San Rafael Guízar en el Antiguo palacio episcopal

CARLOS MORENO BARRERA

En la Arquidiócesis de Xalapa se han abierto, a todo público, las puertas del antiguo Palacio Episcopal, en donde se encuentra el Museo de san Rafael Guízar Valencia, el santo obispo de Veracruz, por lo que nos dirigimos al padre Rafael González, quien fue el vice-postulador de la causa de canonización de dicho santo, para que nos explicara cuál era el significado del Palacio en donde está el Museo.

Nos comentó que el Palacio Episcopal fue la casa y residencia donde servían los obispos, del siglo pasado y fines del siglo antepasado. Quienes vivieron como Obispos fue Don Joaquín Arcadio Pagaza, quien convirtió esta casa en un palacio y de ahí los vidrios biselados con los signos PE que significan Palacio Episcopal y también san Rafael. Agregó que durante la persecución religiosa del estado de Veracruz, el entonces gobernador Adalberto Tejeda, le quitó la casa, después paso a manos de particulares y finalmente paso a la Iglesia.

Le preguntamos acerca de los servicios que posee el Palacio Episcopal y que están a disposición de todos: “Mira, este lugar cuenta con el museo de san Rafael Guízar, donde se presenta la vida y obra de este santo con algunas de sus pertenencias y recreaciones; además tiene el servicio de cafetería para los visitantes; al igual que una tienda de artículos religiosos; también están las instalaciones propias del Tribunal Eclesiástico; la redacción de alégrate y la oficina de comunicación social”. Por otro lado, agregó que existe una sala de conferencias, con capacidad para cien personas y lleva el nombre de Monseñor Sergio Obeso Rivera.

Después de escuchar los servicios que presta este lugar, le hicimos la pregunta de cuáles eran los beneficios para la Diócesis de Xalapa: “Sin duda alguna es un beneficio muy grande para la ciudad de Xalapa; ya que atraerá turismo para esta ciudad, el cual podríamos llamar turismo religioso. Sin embargo, afirmó que no es exclusivo para los creyentes católicos sino para todo público.

A pesar de todos los beneficios que mencionó al final expresó que sí se puede hablar de un beneficio espiritual porque se trata de exhibir, exponer la vida y obra de un santo, y que invitará a todos a la reflexión y naturalmente a imitar los ejemplos de los santos, en este caso de san Rafael Guízar Valencia, y que es un aspecto muy fuerte que impactará a sus visitantes.

El presbítero al finalizar invitó a todo público a visitar el Museo el cual tiene el horario de 9:00 a.m. – 14.00 hrs. y de 16:00 hrs. – 20:00 hrs. de lunes a sábado y los domingos de 9:00 a.m. – 14:00 hrs., la entrada es gratuita.

Sin duda alguna la apertura del Antiguo Palacio Episcopal es el rescatar una gran obra que ha perdurado por mucho tiempo y que ahora está a disposición de todos.



“Los indígenas me enseñaron a ver y vivir la vida de manera diferente”: Mons. Felipe Arismendi

MOISÉS ANTONIO MARTÍNEZ MTZ.

“Los seminaristas indígenas son aquellos que provienen de pueblos originarios: el Náhuatl, el Zoque, Tzotziles, Tarahumaras, Mayas, Chinantecos, Mazatecos, etc., pero sobre todo aquellos que reconocen y aceptan esta identidad, pues algunos, aunque nacieron en esos pueblos, ya no se quieren reconocer como tales”. Es así como monseñor Felipe Arizmendi, encargado de la dimensión de Pastoral Indígena de la Comisión Episcopal y obispo de San Cristóbal de las Casas, Chiapas, definió a este tipo de seminaristas en la entrevista que Concilio le hizo acerca de su trabajo de evangelización con los indígenas.

“El modo de los indígenas al expresar sus relaciones familiares, su fe y su religión, me enseñaron a ver la vida de manera diferente”, comenta monseñor al preguntarle sobre la relación con los indígenas. Dice que esto le ha permitido enriquecer su fe y su cultura, pues fue párroco de una comunidad Otomí, en 1967, en la diócesis de Toluca. Su rostro serio, que expresaba una profunda conciencia y preocupación por la realidad indígena, cambiaba de expresión según las preguntas que le hacíamos, como si volvieran aquellos momentos que había vivido.

Después de saber sobre su relación con los indígenas le cuestionamos sobre los diáconos casados que hay en su diócesis. Él nos dijo que estaba muy contento con los 320 diáconos casados que tiene, pues son unos de los protagonistas más importantes de la evangelización, de la santificación y de la promoción social del pueblo. “Yo le pido a Dios que los bendiga porque muchos de ellos ya son ancianos, están muy enfermos, y ya no se dan abasto a tantas necesidades pastorales que hay que atender” nos comentó con voz clara, fuerte y comprometida.

Debido a esta necesidad que hay en las comunidades indígenas ha pedido apoyo a los obispos para que les manden sacerdotes: la arquidiócesis de Monterrey, San Luis Potosí, Morelia, Toluca, Tuxtla Gutiérrez y Tapachula le han apoyado. Aclara que también en otros lugares hay muchas necesidades y no siempre los han podido apoyar. “Pero lo mismo, podrían ir de Xalapa”, nos dirige este comentario con un gesto de invitación y una sonrisa espontánea.

-Mons. Arismendi, usted ha estado muy de cerca con los indígenas. ¿Se siente realizado en esta región? Después de pensarlo por unos segundos nos dijo con ese tono de voz que lo caracteriza: “Todos tenemos que ubicarnos donde Dios nos coloca. Yo fui feliz trabajando 20 años en la formación de sacerdotes, en el Seminario de Toluca; fui muy feliz en la comunidad Otomí donde fui párroco; y ahora estoy agradecido con Dios que me permite trabajar en una diócesis donde la mayoría son indígenas”.

Concluye la entrevista mencionando que el Papa Juan Pablo II habló e insistió mucho en la importancia de que los indígenas fueran protagonistas de la evangelización. Y que en su diócesis hay muchos laicos que lo son realmente, gracias a ellos la evangelización ha llegado por todas partes. Amablemente agradeció y se despidió de nosotros.

En la diócesis que está laborando este obispo hay una población de un millón y medio de habitantes, de la cual el 75% son indígenas de 5 etnias: Tzotziles, Xantales, Choles, Tojolabales y Zoques.

Por la entrevista y su disposición le agradecemos a monseñor Felipe Arizmendi y esperamos que siga haciendo una labor tan ardua como la está haciendo.



El eterno pleito

JOSÉ LUIS ALVARADO JÁCOME


En este mes se ha desatado la polémica porque la Iglesia de Xalapa a través de un documento que se presentó el pasado miércoles 1 de octubre se ha declarado en defensa de la vida del no nacido y por consiguiente en contra del aborto, poniendo razones no sólo de fe sino bien fundamentadas en la medicina y en otras ramas para declararse a favor de la vida.

Tratándose de la Iglesia Católica se toma como un desafío para ver quién la puede vencer. Recuerda a un ring para esperar al final quién es el vencedor. Se sigue insistiendo, no se trata de una lucha de poder sino de iluminar a la comunidad con la finalidad de elegir lo mejor, el bien. Tristemente nos hemos visto atacados por quienes tergiversan los mismos eventos y por quienes con argumentos falaces ad hominem –contra el hombre – quieren salvar su postura.

El pasado miércoles 8 del presente se asistió a un foro para presentar diferentes puntos de vista de este problema del aborto. Participaron una diputada del D.F., un médico, una estudiante de psicología y su servidor. Todos sabemos que en un foro, precisamente, se expone con argumentos la propia postura. Desgraciadamente no todos lo entienden así, ya que hubo quien se dedicó a atacar en vez de explicar, de falsear en vez de proponer y eso no se vale. Para empezar, en este mundo plural lo que se defiende es la pluralidad, por otra parte también está el respeto y la búsqueda por la verdad, que en ningún caso puede ser subjetiva ni relativa. Las cosas son como son. Al representante de la postura católica se le acusó de manipular sentimientos por el hecho de presentar algunas fotografías de aborto, pero no se trata de trabajar con eufemismos sino con la verdad.

Las noticias que presentaron los diferentes medios de comunicación nos han tachado (según declaraciones) de “misóginos”, cosa totalmente falsa porque jamás se hizo mención de las mujeres que abortan, únicamente nos basamos en el problema del aborto y el inicio de la vida humana. Siguiendo la doctrina cristiana, se juzga al pecado, no al pecador que merece todo el respeto y la misericordia del Creador. Que no se confunda el acto de abortar con la mujer que aborta, moralmente son dos cosas muy distintas. Las mujeres, al igual que todos los seres humanos merecen todo el respeto y la dignidad, eso es lo que pide la Iglesia para los no nacidos que son más inocentes puesto que no se pueden defender. Ahora bien, también se tacha a la Iglesia de “cortar la libertad”, si la libertad no conlleva una responsabilidad no se puede hablar de verdadera libertad. Cada persona puede hacer lo que quiera, la Iglesia busca formar conciencias para saber actuar. Todo lleva un orden y mantiene una verdad. Si porque estamos a favor de la vida y reconocemos que el inicio de ésta se encuentra en la fecundación (y se tienen muestras tangibles y científicas) nos tachan de oscurantistas ¡Bendito sea Dios! porque nos convierten en heraldos de la verdad.

Entonces, ¿por qué tapar el pozo después de ahogado el niño? No se trata de “salvar la situación” sino de dar a la población una educación integral de la sexualidad, de mejorar los niveles educativos, de salud, recreativos y socioeconómicos. Lamentablemente eso es muy difícil, es mucho más fácil dar facilidades para acabar con vidas humana inaceptadas. No se trata de condenar ni de imponer sino de iluminar, seguimos en la defensa de la vida humana, tenemos nuestra recompensa: Benditos sean ustedes si los injurian por causa del Evangelio.



C O N C I L I Á B U L O

El Obispo de Córdoba, en el Sínodo


El Sínodo universal de los Obispos es una asamblea verdaderamente extraordinaria. Si uno lee la lista, se queda sorprendido al ver la catolicidad de la Iglesia. El Papa no está solo. De México hay cuatro obispos: monseñor Eduardo Porfirio Patiño Leal, obispo de Córdoba, monseñor Benjamín Castillo Plascencia, obispo de Tabasco, monseñor Enrique Díaz Díaz, obispo titular de Izirzada, obispo auxiliar de San Cristóbal de Las Casas y monseñor Ruy Rendón Leal, obispo prelado de El Salto. Lo más cercano a nosotros es monseñor Eduardo Patiño Leal que es especialista en ciencias bíblicas y que nos representa en esta magna asamblea.


Sacada en vilo

El martes 7 llovió torrencialmente y los campos del seminario se inundaron. Lo sorpresivo fue que el formidable coche de la maestra de lógica, doctora y psiquiatra María del Rosario Amieva, se quedó atascado. Varios alumnos de 3º de Filosofía acudieron presurosos para sacarla en vilo por la ventana. La maestra Amieva, como se le conoce en el Seminario, quedó muy agradecida con estos alumnos.


La primera parte de la tesis

Esta semana, los alumnos de cuarto de Filosofía tienen que entregar la primera parte de su tesis. La investigación suele ser lenta y requiere mucho trabajo pero, si uno no pone términos fijos, las cosas se pueden seguir indefinidamente. Parece que en todo es necesario poner plazos fijos para que uno se vea obligado a redactar sin darle más vueltas al asunto. Una de las tentaciones más grandes suele ser el cambio de tema porque, mientras se estudia una cuestión, se representan otras más interesantes o más atractivas. También aquí hace falta continencia y fidelidad.


El Domund

Este domingo es el Domingo Mundial de las Misiones. Está muy extendida la idea de que todas las religiones son iguales y de que cualquier cosa vale a los ojos de Dios. Pero nunca hay que olvidar que Dios Padre nos ha enviado a su Hijo para salvar al mundo y que Él es el Camino, al Verdad y la Vida. Con el testimonio y con la palabra, con discreción y prudencia, se debe anunciar a Jesucristo muerto y resucitado para nuestra salvación y saber cuál es la voluntad de Dios, por más que la ignorancia o la inconciencia pudieran excusar a muchos. Y se trata de una Iglesia o de una fe que debe ser universal, es decir, que llegue a todo el mundo. Y si eso no se ha logrado, en buena parte es porque los cristianos no han sabido dar el testimonio de unidad que se esperaba de ellos.


" El que se dedica a la venganza conserva fresca sus heridas".
Francis Bacon

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