Plana semanal del Seminario Arquidiocesano de Xalapa, Ver. MÉXICO
Desde el año 2000
Aparece los domingos en el Diario de Xalapa
E D I T O R I A L
Protagonizar lo que la celebración propone
El cumplimiento y festejo de la Semana Santa no es una fiesta más para los católicos y para las personas de buena voluntad. Es una experiencia y vivencia fundamental de la presencia de la Dios en la vida de las personas convencidas de la posibilidad de la actuación de Dios en el tiempo y en el espacio. La vivencia y valoración de estos Tres Días ofrece dos alternativas de celebración. Podemos cumplir con lo que manda la tradición y llevar a cabo, resignada y tediosamente, el ritos y sus exigencias que la fecha impone; o, podemos protagonizar lo que la celebración ya milenaria propone, de manera tal que nuestra propia vida se vea enriquecida por el cumplimiento de aquellas promesas latentes que la celebración de los Tres Días nos permite realizar anualmente”. No sólo la celebración de una vida nueva sino vivirla cada día en el encuentro con los que menos tienen nuestro apoyo y cercanía cálidas. Aprender a vivir una vida nueva sobrenatural implica en primer momento reconocerse necesitado de ella. Y después todo se da cada día en el vivir de cada día con los demás que comparte su existencia directa o indirectamente con nosotros.
La sociedad enseña a ser delincuentes: Mons. Domingo Díaz Martínez
Efrén Moreno y Luis Mario Román
Aproximadamente a las diez y media de la mañana del pasado miércoles 5 de marzo arribó a las instalaciones de la casa de la Iglesia de la Arquidiócesis de Xalapa, el Obispo de Tuxpan, Mons. Domingo Díaz Martínez, Coordinador nacional de la Pastoral Penitenciaria. Instantes después llegó el padre Isaías Piña Montiel, Rector de la Iglesia de la Divina Misericordia y Nuestra Sra. del Carmen de Xalapa y Asesor Nacional de la Pastoral Penitenciaria; así como personas de diferentes diócesis de la zona Golfo.
El motivo de esta pequeña reunión fue iniciar con los preparativos para la Asamblea Nacional de la Pastoral Penitenciaria 2008 que tendrá como sede la ciudad de Xalapa. Se congregaron para compartir experiencias y reflexionar temas importantes que enriquecen a la misma. Se han dividido ya los servicios en las distintas diócesis y Xalapa cuenta con el apoyo de las diócesis hermanas. También se envió una encuesta a los CE.RE.SO y las cárceles del país, que son alrededor de 450.
En entrevista a Mons. Domingo Díaz nos comentó, con una sonrisa en su rostro, que la Pastoral Penitenciaria es la acción que hace la Iglesia, dirigida a los hermanos que se encuentran privados de su libertad y que comienza desde su detención hasta su liberación.
La plática se hizo muy amena y preguntamos sobre cómo es que se organiza la Pastoral Penitenciaria. Mons. Domingo indicó que es la Conferencia del Episcopado Mexicano la que nombra a un obispo quien coordina a un equipo de sacerdotes y de laicos que le auxilian para organizar y animar dicha pastoral. Así mismo, señaló que en cada provincia hay un responsable, así como en cada diócesis. Destacó el papel fundamental del asesor nacional, el Pbro. Isaías Piña Montiel.
Mientras Mons. Díaz tomaba una taza de café, preguntamos la razón por la que la Iglesia va a buscar a los presos y el por qué, cuando un preso termina su condena, es difícil que la sociedad lo vuelva a aceptar. Él respondió claramente que la Iglesia va a los presos porque son nuestros hermanos y éstos no se pueden dejar solos. Además señaló que la Iglesia no es completamente libre, que si hay presos en las cárceles que no están siendo evangelizados es nuestra obligación el atenderlos.
Por otra parte, el obispo de San Andrés señaló sobre la dificultad que encuentra un preso para readaptarse a la sociedad. Dijo que es la sociedad quien no se da esa oportunidad de reflexionar; los ha enseñado a ser delincuentes y ahora no quiere cagar con ellos. También reconoció que es verdad que no todos podemos ir a visitarlos a las cárceles o penales, pero que sí debemos de preocuparnos por ellos, cooperando y colaborando con los equipos que van a trabajar con los presos. Además los que van, deben hacer bien su trabajo, pues van en nombre de todos y después, cuando un interno deja la cárcel, hay que animarlo, cuidarlo, pues en eso consiste esa cooperación y, claro, haciendo mucha oración por los presos.
Al finalizar nuestra conversación, Mons. Domingo, nos pidió, de la manera más atenta, que transmitiéramos este mensaje a todos los que trabajan en equipos parroquiales y que visitan las cárceles; a los mismos directores de los Penales y cárceles y a los mismos internos: “Hermanos agentes de la Pastoral Penitenciaria, los presos necesitan, por sobre todas las cosas amor; segundo, los presos buscan sabiduría, ¿en dónde encontramos el amor? en la Eucaristía y ¿la sabiduría? en las Sagradas Escrituras. Debemos de ir a las cárceles y a los penales con una cara que contagie la alegría. Hermanos presos: ¡Abran su corazón para recibir la palabra del Señor! Dejen que se siembre la palabra de Dios en sus corazones y preparen su corazón para poder recibirla, pues esa semilla sembrada, un día dará su fruto y, al final, cosecharán bondad, alegría, felicidad y tantas cosas que pueden cosechar. Por último, también me dirijo a los directores de las cárceles y penales de todo México. Vean a los internos como sus hermanos, ellos necesitan ayuda. No los vean como una carga o como sus rivales, sino véanlos como sus hermanos, pues todos formamos parte de la gran familia de Dios”.
Al finalizar su mensaje, aceptó tomarse unas fotos para la página CONCILIO, junto con los miembros del equipo nacional de la Pastoral Penitenciaria y nos despedimos de él no sin antes recibir su bendición.
Protagonizar lo que la celebración propone
El cumplimiento y festejo de la Semana Santa no es una fiesta más para los católicos y para las personas de buena voluntad. Es una experiencia y vivencia fundamental de la presencia de la Dios en la vida de las personas convencidas de la posibilidad de la actuación de Dios en el tiempo y en el espacio. La vivencia y valoración de estos Tres Días ofrece dos alternativas de celebración. Podemos cumplir con lo que manda la tradición y llevar a cabo, resignada y tediosamente, el ritos y sus exigencias que la fecha impone; o, podemos protagonizar lo que la celebración ya milenaria propone, de manera tal que nuestra propia vida se vea enriquecida por el cumplimiento de aquellas promesas latentes que la celebración de los Tres Días nos permite realizar anualmente”. No sólo la celebración de una vida nueva sino vivirla cada día en el encuentro con los que menos tienen nuestro apoyo y cercanía cálidas. Aprender a vivir una vida nueva sobrenatural implica en primer momento reconocerse necesitado de ella. Y después todo se da cada día en el vivir de cada día con los demás que comparte su existencia directa o indirectamente con nosotros.
La sociedad enseña a ser delincuentes: Mons. Domingo Díaz Martínez
Efrén Moreno y Luis Mario Román
Aproximadamente a las diez y media de la mañana del pasado miércoles 5 de marzo arribó a las instalaciones de la casa de la Iglesia de la Arquidiócesis de Xalapa, el Obispo de Tuxpan, Mons. Domingo Díaz Martínez, Coordinador nacional de la Pastoral Penitenciaria. Instantes después llegó el padre Isaías Piña Montiel, Rector de la Iglesia de la Divina Misericordia y Nuestra Sra. del Carmen de Xalapa y Asesor Nacional de la Pastoral Penitenciaria; así como personas de diferentes diócesis de la zona Golfo.
El motivo de esta pequeña reunión fue iniciar con los preparativos para la Asamblea Nacional de la Pastoral Penitenciaria 2008 que tendrá como sede la ciudad de Xalapa. Se congregaron para compartir experiencias y reflexionar temas importantes que enriquecen a la misma. Se han dividido ya los servicios en las distintas diócesis y Xalapa cuenta con el apoyo de las diócesis hermanas. También se envió una encuesta a los CE.RE.SO y las cárceles del país, que son alrededor de 450.
En entrevista a Mons. Domingo Díaz nos comentó, con una sonrisa en su rostro, que la Pastoral Penitenciaria es la acción que hace la Iglesia, dirigida a los hermanos que se encuentran privados de su libertad y que comienza desde su detención hasta su liberación.
La plática se hizo muy amena y preguntamos sobre cómo es que se organiza la Pastoral Penitenciaria. Mons. Domingo indicó que es la Conferencia del Episcopado Mexicano la que nombra a un obispo quien coordina a un equipo de sacerdotes y de laicos que le auxilian para organizar y animar dicha pastoral. Así mismo, señaló que en cada provincia hay un responsable, así como en cada diócesis. Destacó el papel fundamental del asesor nacional, el Pbro. Isaías Piña Montiel.
Mientras Mons. Díaz tomaba una taza de café, preguntamos la razón por la que la Iglesia va a buscar a los presos y el por qué, cuando un preso termina su condena, es difícil que la sociedad lo vuelva a aceptar. Él respondió claramente que la Iglesia va a los presos porque son nuestros hermanos y éstos no se pueden dejar solos. Además señaló que la Iglesia no es completamente libre, que si hay presos en las cárceles que no están siendo evangelizados es nuestra obligación el atenderlos.
Por otra parte, el obispo de San Andrés señaló sobre la dificultad que encuentra un preso para readaptarse a la sociedad. Dijo que es la sociedad quien no se da esa oportunidad de reflexionar; los ha enseñado a ser delincuentes y ahora no quiere cagar con ellos. También reconoció que es verdad que no todos podemos ir a visitarlos a las cárceles o penales, pero que sí debemos de preocuparnos por ellos, cooperando y colaborando con los equipos que van a trabajar con los presos. Además los que van, deben hacer bien su trabajo, pues van en nombre de todos y después, cuando un interno deja la cárcel, hay que animarlo, cuidarlo, pues en eso consiste esa cooperación y, claro, haciendo mucha oración por los presos.
Al finalizar nuestra conversación, Mons. Domingo, nos pidió, de la manera más atenta, que transmitiéramos este mensaje a todos los que trabajan en equipos parroquiales y que visitan las cárceles; a los mismos directores de los Penales y cárceles y a los mismos internos: “Hermanos agentes de la Pastoral Penitenciaria, los presos necesitan, por sobre todas las cosas amor; segundo, los presos buscan sabiduría, ¿en dónde encontramos el amor? en la Eucaristía y ¿la sabiduría? en las Sagradas Escrituras. Debemos de ir a las cárceles y a los penales con una cara que contagie la alegría. Hermanos presos: ¡Abran su corazón para recibir la palabra del Señor! Dejen que se siembre la palabra de Dios en sus corazones y preparen su corazón para poder recibirla, pues esa semilla sembrada, un día dará su fruto y, al final, cosecharán bondad, alegría, felicidad y tantas cosas que pueden cosechar. Por último, también me dirijo a los directores de las cárceles y penales de todo México. Vean a los internos como sus hermanos, ellos necesitan ayuda. No los vean como una carga o como sus rivales, sino véanlos como sus hermanos, pues todos formamos parte de la gran familia de Dios”.
Al finalizar su mensaje, aceptó tomarse unas fotos para la página CONCILIO, junto con los miembros del equipo nacional de la Pastoral Penitenciaria y nos despedimos de él no sin antes recibir su bendición.
“Cambia la Misa Crismal”
(Entrevista al P. Gilberto Suárez Rebolledo, Vicario General de la Arquidiócesis de Xalapa)
Moisés Martínez
Tradicionalmente el Jueves Santo se celebra la misa que se llama “Crismal” en la Catedral Metropolitana de Xalapa, en dicha celebración se reúnen los sacerdotes para renovar sus promesas, pero ahora nos dicen que va a ver un cambio.
Con respecto a este tema, el P. Gilberto Suárez Rebolledo, que ahora es el Vicario General, luego de los muchos años que fue Vicario General –con lealtad y dedicación- el P. Misael Cruz, nos confirma este dato y nos lo explica: “El señor Arzobispo, Don Hipólito Reyes Larios, planteó que se quería privilegiar el encuentro con los sacerdotes, el aspecto sacerdotal. En atención, también a los sacerdotes y feligreses que vienen de lugares lejanos: que no estén corriendo para celebrar los oficios propios del Triduo Pascual que inician el Jueves Santo por la tarde. Además ese es el día de la institución del sacerdocio y no había un momento de encuentro entre los sacerdotes, mermaba el encuentro sacerdotal, y la manera de poderlo privilegiar era cambiando la misa Crismal a Miércoles Santo a las 12: 00 p.m. Este deseo se expuso ante los sacerdotes en la última reunión plenaria que se realizó. Se hizo una votación indicativa, la mayoría estuvo de acuerdo y entonces el Obispo decidió el cambio de día: en razón de privilegiar un encuentro con su presbiterio. Ya después de la celebración tendremos un momento para convivir entre sacerdotes junto con el Obispo”.
El P. Gilberto, estando totalmente convencido y de acuerdo con esta sugerencia, nos dijo que es un buen cambio porque se trata de privilegiar a los sacerdotes con el Obispo a la cabeza. Considera que hace falta fortalecer la espiritualidad y comunión entre ellos para comprender mejor lo que es su ministerio y espiritualidad sacerdotal.
-P. Gilberto, nos han contado que es muy grato ver por las calles a grupos que llevan los Santos Óleos a sus parroquias, pero ¿qué son esos Óleos?
Pensando unos segundos su respuesta y consultando un libro que tenía a la mano nos expresó: “Los Óleos son los signos visibles de salvación que se utilizan en los sacramentos de la vida de la Iglesia. Son bendecidos por el Obispo y, al ungirlos a las personas, se realiza el sacramento, están ligados al aspecto sacramental. Luego entonces, son vehículos para que la persona experimente la sanación o comunicación de la gracia al ser ungida. A través de ese signo Dios se hace presente en la vida de las personas”.
También nos atrevimos a preguntarle acerca de las vacaciones de Semana Santa. Él, con esa seguridad que lo caracteriza, nos respondió: “Yo distinguiría varios aspectos. Una persona tiene derecho a vacacionar si todo el tiempo laboral se ha dedicado a desgastarse físicamente, no está mal que alguien tome algunos días de esparcimiento. Cuando hay un divorcio del descanso, mis vacaciones, mi descanso, con mi fe entonces es ahí donde tenemos que detenernos a pensar: todavía nos hace falta madurar en nuestra fe para ligarla con un momento de esparcimiento, de descanso, de convivencia. El que alguien tome las vacaciones que legítimamente le corresponden no está reñido con nuestra fe, puede vacacionar, pero sin descuidar el aspecto de la fe”. Esto lo expresó con energía, como queriendo que todos comprendieran la complementariedad de estas dos realidades: fe y vacaciones.
Por su parte él se dedicará a los oficios propios en esta Semana Santa, tratando que se dé toda la participación de la parroquia de San Pio X, que es la comunidad que actualmente tiene a su cargo. Realizará pascua infantil, juvenil y con los adultos. Involucrará a los enfermos con una misa especial para ellos y los visitará, puesto que la enfermedad es uno de los elementos más palpables donde uno se puede incluir a la pasión de Cristo.
-P. Gilberto, ¿cuál es su mensaje para esta Semana Santa?
“Vivir las celebraciones para que por las celebraciones se dicte algo a la propia fe. Tratar de ver en todos los acontecimientos celebrativos (Domingo de Ramos, Lavatorio de pies, en la misma muerte de Cristo, en la Vigilia Pascual, etc.) el gran amor que Dios ha tenido para cada uno de nosotros y que nosotros, al contemplar ese amor sepamos responder de la misma manera”.
Gracias P. Gilberto. Ahora le toca a usted ser el brazo fuerte o el segundo hombre del Arzobispo Hipólito Reyes Larios, que Dios le conceda a usted y a todos celebrar digna y santamente esta Semana Santa que es de vacaciones y religiosidad.
C O N C I L I Á B U L O
(Entrevista al P. Gilberto Suárez Rebolledo, Vicario General de la Arquidiócesis de Xalapa)
Moisés Martínez
Tradicionalmente el Jueves Santo se celebra la misa que se llama “Crismal” en la Catedral Metropolitana de Xalapa, en dicha celebración se reúnen los sacerdotes para renovar sus promesas, pero ahora nos dicen que va a ver un cambio.
Con respecto a este tema, el P. Gilberto Suárez Rebolledo, que ahora es el Vicario General, luego de los muchos años que fue Vicario General –con lealtad y dedicación- el P. Misael Cruz, nos confirma este dato y nos lo explica: “El señor Arzobispo, Don Hipólito Reyes Larios, planteó que se quería privilegiar el encuentro con los sacerdotes, el aspecto sacerdotal. En atención, también a los sacerdotes y feligreses que vienen de lugares lejanos: que no estén corriendo para celebrar los oficios propios del Triduo Pascual que inician el Jueves Santo por la tarde. Además ese es el día de la institución del sacerdocio y no había un momento de encuentro entre los sacerdotes, mermaba el encuentro sacerdotal, y la manera de poderlo privilegiar era cambiando la misa Crismal a Miércoles Santo a las 12: 00 p.m. Este deseo se expuso ante los sacerdotes en la última reunión plenaria que se realizó. Se hizo una votación indicativa, la mayoría estuvo de acuerdo y entonces el Obispo decidió el cambio de día: en razón de privilegiar un encuentro con su presbiterio. Ya después de la celebración tendremos un momento para convivir entre sacerdotes junto con el Obispo”.
El P. Gilberto, estando totalmente convencido y de acuerdo con esta sugerencia, nos dijo que es un buen cambio porque se trata de privilegiar a los sacerdotes con el Obispo a la cabeza. Considera que hace falta fortalecer la espiritualidad y comunión entre ellos para comprender mejor lo que es su ministerio y espiritualidad sacerdotal.
-P. Gilberto, nos han contado que es muy grato ver por las calles a grupos que llevan los Santos Óleos a sus parroquias, pero ¿qué son esos Óleos?
Pensando unos segundos su respuesta y consultando un libro que tenía a la mano nos expresó: “Los Óleos son los signos visibles de salvación que se utilizan en los sacramentos de la vida de la Iglesia. Son bendecidos por el Obispo y, al ungirlos a las personas, se realiza el sacramento, están ligados al aspecto sacramental. Luego entonces, son vehículos para que la persona experimente la sanación o comunicación de la gracia al ser ungida. A través de ese signo Dios se hace presente en la vida de las personas”.
También nos atrevimos a preguntarle acerca de las vacaciones de Semana Santa. Él, con esa seguridad que lo caracteriza, nos respondió: “Yo distinguiría varios aspectos. Una persona tiene derecho a vacacionar si todo el tiempo laboral se ha dedicado a desgastarse físicamente, no está mal que alguien tome algunos días de esparcimiento. Cuando hay un divorcio del descanso, mis vacaciones, mi descanso, con mi fe entonces es ahí donde tenemos que detenernos a pensar: todavía nos hace falta madurar en nuestra fe para ligarla con un momento de esparcimiento, de descanso, de convivencia. El que alguien tome las vacaciones que legítimamente le corresponden no está reñido con nuestra fe, puede vacacionar, pero sin descuidar el aspecto de la fe”. Esto lo expresó con energía, como queriendo que todos comprendieran la complementariedad de estas dos realidades: fe y vacaciones.
Por su parte él se dedicará a los oficios propios en esta Semana Santa, tratando que se dé toda la participación de la parroquia de San Pio X, que es la comunidad que actualmente tiene a su cargo. Realizará pascua infantil, juvenil y con los adultos. Involucrará a los enfermos con una misa especial para ellos y los visitará, puesto que la enfermedad es uno de los elementos más palpables donde uno se puede incluir a la pasión de Cristo.
-P. Gilberto, ¿cuál es su mensaje para esta Semana Santa?
“Vivir las celebraciones para que por las celebraciones se dicte algo a la propia fe. Tratar de ver en todos los acontecimientos celebrativos (Domingo de Ramos, Lavatorio de pies, en la misma muerte de Cristo, en la Vigilia Pascual, etc.) el gran amor que Dios ha tenido para cada uno de nosotros y que nosotros, al contemplar ese amor sepamos responder de la misma manera”.
Gracias P. Gilberto. Ahora le toca a usted ser el brazo fuerte o el segundo hombre del Arzobispo Hipólito Reyes Larios, que Dios le conceda a usted y a todos celebrar digna y santamente esta Semana Santa que es de vacaciones y religiosidad.
C O N C I L I Á B U L O
Procesiones y playas
Nuestro pueblo se divide en estos días de vacaciones. Unos se van a las playas y otros –más piadosos, participan activamente en las celebraciones religiosas, las que vulgarmente se llaman semana santa o, con más exactitud, la “Pascua del Señor Jesucristo”, es decir, su paso de la muerte a la vida, luego de su obediencia total en contraposición del antiguo Adán.
Nosotros nos vamos durante la primera semana, para acompañar a los fieles, en los más diversos pueblos y parroquias; y luego, a nuestras casas de vacaciones. La religión no tiene que ser opresión ni masoquismo, sino liberación y alegría.
Nosotros nos vamos durante la primera semana, para acompañar a los fieles, en los más diversos pueblos y parroquias; y luego, a nuestras casas de vacaciones. La religión no tiene que ser opresión ni masoquismo, sino liberación y alegría.
Una dotación de libros
El Padre Juan Beristain nos ha conseguido, de la editorial de la Universidad Veracruzana (UV), una buena dotación de libros que ingresan a la biblioteca. Se lo agradecemos cordialmente a las autoridades universitarias, en especial al señor Rector Dr. Raúl Arias Lovillo. También hemos visto con mucho gusto los nombramientos de amigos muy conocidos, como el Dr. Adolfo García de la Sienra, nuevo director del Instituto de Investigaciones Filosóficas (IF) y del Dr. Daniel Gómez, en el Instituto de Investigación en Psicología y Educación (IIPE).
La Editorial de la Universidad ha tenido días gloriosos y la UV, en general, tiene hoy significativos reconocimientos en la administración actual.
Bibliografía sobre san Rafael Guízar Valencia
Ponemos a continuación una lista cronológica de los libros que conocemos sobre el Santo Rafael Guízar Valencia. Sabemos que más de uno nos lo agradecerá.
1950. LORET DE MOLA, C. Ángel sin ojos. Biografía de Monseñor Rafael Guízar y Valencia. Impresos Modernos S. A. México. 205 pp.
1951. CORREA, E. J. Mons. Rafael Guízar y Valencia. El obispo Santo. 1878-1938. Librería de Manuel Porrúa. México. 186 pp.
1951. DE LA MORA J. Apuntes biográficos del beato Mons. Rafael Guízar y Valencia. Editorial Mons. Rafael Guízar y Valencia. Xalapa. 226 pp.
1975. PEÑALOSA, J. A. Rafael Guízar, a sus órdenes. Ediciones “Rafael Guízar y Valencia”. Xalapa. 264 pp.
1995. BARRAJÓN, P. A. Monseñor Rafael Guízar y Valencia. Amigo de los pobres. Editorial Diana. México. 259 pp.
1995. LEHONOR ARROYO, I. Mis recuerdos de Monseñor Guízar y Valencia. Ediciones diocesanas “Rafael Guízar y Valencia”. Xalapa. 129 pp.
1997. ORTIZ, H. Milagro, Intercesión del misionero del amor Beato Rafael Guízar y Valencia. Ediciones diocesanas “Rafael Guízar y Valencia”. Xalapa. 226 pp.
2003. CUEVAS CANCINO, F. La senda del amor ilimitado. Durandarte Editores. Xalapa. 60 pp.
2004. AGUILAR CABEZA DE VACA, J. La caridad en los escritos del beato monseñor Rafael Guízar Valencia. Editora Jalapeña. Xalapa. 134 pp.
2004. ALVARADO JÁCOME J. L. Nada le he negado al Señor. La espiritualidad de don Rafael Guízar y Valencia desde sus escritos. Ediciones diocesanas Rafael Guízar y Valencia. Xalapa (México). 198 pp.
2006. BÁEZ-JORGE FÉLIX. Olor de santidad. San Rafael Guízar y Valencia: articulaciones históricas, políticas y simbólicas de una devoción particular. Universidad Veracruzana. Xalapa. 630 pp.
2006. BARRADAS, C. Semblanza de un santo. San Rafael Guízar y Valencia. Quinto obispo de Veracruz 1920-1938. Una mirada a su interior. Ediciones San José. Xalapa. 238 pp.
2006. BARRAJÓN PEDRO A. San Rafael Guízar Valencia. Obispo misionero. Primer obispo mexicano en los altares. El Arca Editores. México. 221 pp.
2006. CEJA A. JESÚS. San Rafael Guízar Valencia. Misionero incansable según el corazón de Cristo. Un llamado a la santidad. (Pedidos a P. Jesús Ceja Álvarez, Tel. 33 3675-4777, jjcascim@yahoo.com.mx, Guadalajara, Jalisco) 240 pp.
2006. HAVERS G. M. Un obispo aventurero de Dios. Beato Rafael Guízar Valencia, 5º obispo de Veracruz. Guadalajara.
La Editorial de la Universidad ha tenido días gloriosos y la UV, en general, tiene hoy significativos reconocimientos en la administración actual.
Bibliografía sobre san Rafael Guízar Valencia
Ponemos a continuación una lista cronológica de los libros que conocemos sobre el Santo Rafael Guízar Valencia. Sabemos que más de uno nos lo agradecerá.
1950. LORET DE MOLA, C. Ángel sin ojos. Biografía de Monseñor Rafael Guízar y Valencia. Impresos Modernos S. A. México. 205 pp.
1951. CORREA, E. J. Mons. Rafael Guízar y Valencia. El obispo Santo. 1878-1938. Librería de Manuel Porrúa. México. 186 pp.
1951. DE LA MORA J. Apuntes biográficos del beato Mons. Rafael Guízar y Valencia. Editorial Mons. Rafael Guízar y Valencia. Xalapa. 226 pp.
1975. PEÑALOSA, J. A. Rafael Guízar, a sus órdenes. Ediciones “Rafael Guízar y Valencia”. Xalapa. 264 pp.
1995. BARRAJÓN, P. A. Monseñor Rafael Guízar y Valencia. Amigo de los pobres. Editorial Diana. México. 259 pp.
1995. LEHONOR ARROYO, I. Mis recuerdos de Monseñor Guízar y Valencia. Ediciones diocesanas “Rafael Guízar y Valencia”. Xalapa. 129 pp.
1997. ORTIZ, H. Milagro, Intercesión del misionero del amor Beato Rafael Guízar y Valencia. Ediciones diocesanas “Rafael Guízar y Valencia”. Xalapa. 226 pp.
2003. CUEVAS CANCINO, F. La senda del amor ilimitado. Durandarte Editores. Xalapa. 60 pp.
2004. AGUILAR CABEZA DE VACA, J. La caridad en los escritos del beato monseñor Rafael Guízar Valencia. Editora Jalapeña. Xalapa. 134 pp.
2004. ALVARADO JÁCOME J. L. Nada le he negado al Señor. La espiritualidad de don Rafael Guízar y Valencia desde sus escritos. Ediciones diocesanas Rafael Guízar y Valencia. Xalapa (México). 198 pp.
2006. BÁEZ-JORGE FÉLIX. Olor de santidad. San Rafael Guízar y Valencia: articulaciones históricas, políticas y simbólicas de una devoción particular. Universidad Veracruzana. Xalapa. 630 pp.
2006. BARRADAS, C. Semblanza de un santo. San Rafael Guízar y Valencia. Quinto obispo de Veracruz 1920-1938. Una mirada a su interior. Ediciones San José. Xalapa. 238 pp.
2006. BARRAJÓN PEDRO A. San Rafael Guízar Valencia. Obispo misionero. Primer obispo mexicano en los altares. El Arca Editores. México. 221 pp.
2006. CEJA A. JESÚS. San Rafael Guízar Valencia. Misionero incansable según el corazón de Cristo. Un llamado a la santidad. (Pedidos a P. Jesús Ceja Álvarez, Tel. 33 3675-4777, jjcascim@yahoo.com.mx, Guadalajara, Jalisco) 240 pp.
2006. HAVERS G. M. Un obispo aventurero de Dios. Beato Rafael Guízar Valencia, 5º obispo de Veracruz. Guadalajara.
Jornada en Internet
Ya se tuvo un evento detonante de la Jornada Cultural 2008, el pasado 28 de febrero. Ahora queda organizar propiamente lo que corresponde a dicha Jornada, que será del 13 al 15 de abril. Estamos trabajando arduamente. Por tanto, invitamos a que conozca nuestro interés por la familia, que es el tema central de este evento. Consulte www.jornadacultural.blogspot.com.
"El mayor descubrimiento de mi generación es que los seres humanos pueden cambiar de vida cambiando de actitud"
Ya se tuvo un evento detonante de la Jornada Cultural 2008, el pasado 28 de febrero. Ahora queda organizar propiamente lo que corresponde a dicha Jornada, que será del 13 al 15 de abril. Estamos trabajando arduamente. Por tanto, invitamos a que conozca nuestro interés por la familia, que es el tema central de este evento. Consulte www.jornadacultural.blogspot.com.
"El mayor descubrimiento de mi generación es que los seres humanos pueden cambiar de vida cambiando de actitud"
(William James)
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