Domingo 22 de abril de 2007

Plana semanal del Seminario Arquidiocesano de Xalapa, Ver. MÉXICO
Desde el año 2000
Aparece los domingos en el Diario de Xalapa




E D I T O R I A L


Debatir para decidir

Respecto a los temas del aborto, la eutanasia, y la así llamada “sociedad de convivencia”, que en estos días ocupan y preocupan a muchos, es fácil vociferar, imprecar, injuriar, y hasta rasgarse las vestiduras; otra cosa sucede cuando se llevan dichos tópicos a debates serios donde brillan los argumentos con la intención de esclarecer aspectos importantes o fundamentales. Es tiempo de escuchar todas las voces, en vez de ocupar la desautorización prejuiciada para acallar a los que dicen su versión del asunto. Ojalá, antes que se voten las propuestas de ley y se generalicen para todo el país, se propongan espacios donde se expongan razones a favor y en contra sobre cada tema mediante la discusión inteligente por medio de algún método interdisciplinario. De esta forma no se excluye a nadie e indudablemente habrá una inmensa cantidad de propuestas sobre cómo solucionar los problemas polivalentes. ¿Será posible escuchar en la radio, ver en la televisión, leer en un periódico-revista, o participar por internet, un debate donde científicos, políticos, religiosos y profesionistas varios aborden un tema y dejen ilustrado el campo para las decisiones?




Se aproxima la V CELAM
MIGUEL ANTONIO LÓPEZ NIEVA

Ya se empiezan a ver los ajetreos propios de los anfitriones de la V Conferencia del Episcopado Latinoamericano, que este año se celebrará en Aparecida, Brasil. Para los nacidos en este siglo representa algo nuevo, pero los adultos saben la línea que han seguido estas conferencias. En México la más cercana ha sido la de Puebla, cuyo documento se ha reproducido abundantemente y, por tanto, su contenido permanece en la mente de quienes les toca más de cerca propagar la Buena Nueva y promover la caridad a los más necesitados.

Estos son los antecedentes: I. La Conferencia en Río de Janeiro que tuvo la atención en la situación de los evangelizadores por la escasez de sacerdotes; II. La Conferencia de Medellín que propuso aplicar la renovación eclesial del Concilio Vaticano II a América Latina; III. La Conferencia de Puebla, trató sobre la evangelización en el presente y en el futuro de América Latina, basada en la Exhortación Apostólica Evangelii Nuntiandi de Pablo VI, y cuyo principio pastoral fue la comunión y la participación. Retomó, incluso, la dignidad y el destino del ser humano; IV. La Conferencia de Santo Domingo abordó la Nueva Evangelización, la promoción humana y la cultura cristiana teniendo a Jesucristo, que es el mismo ayer, hoy y siempre. (Heb 13,8); y el Sínodo Extraordinario de los Obispos de América, convocado por Juan Pablo II, afirmó que el encuentro con Jesucristo vivo es el camino para la conversión, la comunión y la solidaridad en América.

El Papa Benedicto XVI convocó en Aparecida, Brasil, la V Conferencia General del Episcopado Latinoamericano en mayo del presente año. El tema propuesto es “Discípulos misioneros de Jesucristo, para que nuestros pueblos en él tengan vida, <> (Jn 14, 6)”.

Se han efectuado diversos eventos en cuyo objetivo se profundiza el tema del discipulado y la misión desde diversas perspectivas tales como la bíblica, la teológica y la pastoral. Así se podrá discernir en medio del inmenso cambio cultural en el que vive el género humano, para buscar formas adecuadas de vivir fielmente el Evangelio de Cristo y comunicarlo con ardor misionero.

Es inédito que la base para la oportuna preparación del V CELAM sea el itinerario histórico de nuestros pueblos de América Latina y el Caribe, en sus épocas luminosas y en las sombrías. Y sobre todo se destaca el nombramiento de América como el Continente de la Esperanza al ser mayoritariamente en cantidad católico-cristiano, en medio de las luchas por la libertad, la justicia y la paz, prevalece el desafío de dar fiel testimonio de la fe en Jesucristo; que fue acogida y establecida desde los primeros momentos de encuentro entre las culturas de América y las Europeas.

Ante el paradigma globalizador, los católicos guiados por sus pastores los Obispos, se esfuerzan por crear una nueva unidad y solidaridad Latinoamericana, efectuando así uno de los mandatos de “Jesucristo: sean uno como mi Padre y Yo somos uno”.

Un aspecto esencial de la acción eclesial es que ha permanecido la catolicidad en su arte, en el lenguaje, las tradiciones, la idiosincrasia, los estilos de vida y la rica y variada religiosidad popular del continente (peregrinaciones y fiestas); todo gracias a la acción evangelizadora de obispos, misioneros, religiosos y laicos que con sus vidas sembraron, regaron y han dado fruto el evangelio de Jesucristo vivo y resucitado.

Las Conferencias Episcopales de los diversos continentes se unen en oración para que el Espíritu Santo sea el único guía en el V CELAM. Al mismo tiempo, todos los fieles católicos, en comunión con el sucesor de Pedro, piden a Dios que se obtengan abundantes frutos misioneros en América Latina y el Caribe. Ahora la mirada está puesta en Brasil.




Qué alegre va María
ROGELIO RUEDA RIVERA

Indudablemente los tiempos no son los de ayer, sólo basta con pasearse por las calles y sin detenerse mucho se observan cosas que para nuestros abuelos serías impensables, las modas, expresiones, la misma tecnología. Y es que todo lo que parece cambió en el transcurso de los años no es si no un producto del pensar humano, del cual no me atrevería hablar que “evoluciona”, más bien, responde, pero, ¿a qué?

Nuestra sociedad se encuentra sumergida en un profundo debate, que no sólo tiene lugar actualmente en la política mexicana; se trata de responder a una realidad que desde ya hace tiempo se presenta, y al parecer con más atención últimamente: el aborto.

Existen mentalidades, corrientes ideológicas, que bajo la bandera del activismo en pro de los derechos humanos, más concretamente de las mujeres, apoyan la noción ya conocida de que en nuestro país el aborto se pueda “despenalizar”, otorgando así la libertad constitucional de incurrir en lo que antes, y actualmente se tiene, como delito; así está en nuestras leyes.

Este debate, junto con otros como la eutanasia, los matrimonios gay, que son tratados como “temas delicados” para la sociedad, hacen más daño, o mejor digo, generan más polémica cuando no se hace lo correcto para hablar de ellos y tratarse abiertamente en una mentalidad social propositiva y que esté en la obligación de poder defender nuestras instituciones sociales, que sin duda no son cosa que se puedan replantear de la noche a la mañana.

Como menciono en el principio, no considero que se “evolucione” en la forma de pensar de la sociedad. Se trata de ir cubriendo las necesidades que se van haciendo o se cree que se van haciendo en la vida diaria.

Quizá, la necesidad presente no sea el hecho de despenalizar un hecho delictuoso como lo es el aborto, sino atender de manera especial, al sector de la sociedad que constantemente se ve afectada recurriendo a esta situación: no creo que el problema sean las muertes de miles de mujeres víctimas de abortos clandestinos (esto es sólo una respuesta a una situación, no a una necesidad que se implanta como cierta), si no que el tema abarca más allá de lo que se puede ver; si se analizan las cosas, en la mayoría de los casos se trata de mujeres adolescentes, en gran parte menores de edad.

Antes, la virginidad en la mujer y en el hombre se consideraba algo preciado, como digno de mantenerse hasta la instauración de una institución monógama, complementaria, adulta y responsable como lo es el matrimonio ¿Qué quiere decir esto?, ¿qué la mentalidad o el pensamiento social “evolucionó”?, ¿qué se trata de algo “pasado de moda”?, no. Simplemente se trata de reacciones: la juventud actual tiene que reaccionar ante la apertura desmedida de observar la sexualidad humana como un pasatiempo más, una diversión, algo de los que todo tenemos el derecho de gozar y expresar sin tapujos o inhibiciones desde que ésta se hace más presente en nuestras vidas, me refiero a la pubertad y la adolescencia.

En nuestro país se aporta que actualmente se quiere introducir la idea en la educación básica de que los maestros no son quiénes para llamarles la atención a sus educandos con respecto de su apariencia personal; ningún “te me quitas ese piercing (anillo para perforar) para mañana”, nada de “si no traes el cabello corto no entrarás”, y se teme ya decir “las señoritas de su edad no deben maquillarse tanto”. Aquí es donde viene el berrinche, el arrebato, “son nuestros derechos”, “dónde queda la libertad de expresión” “es mi cuerpo” “es mi sexo”; entonces el maestro queda como un infractor de las instituciones internacionales que protegen la individualidad y los derechos de los individuos, tanto así que al punto hasta se les podría comparar con los del KKK (Ku Klux Klan). A esto es muy fácil como padres de familia hacerse los desentendidos, y ni preguntar cuando nuestros hijos de secundaria llegan a las casas con preservativos que el sector salud regala en pláticas de sexualidad humana.

A toda acción, una reacción; entonces, no es el caso tratar de despenalizar el aborto, porque éste no es más que una parte del problema social que constituyen las enfermedades de transmisión sexual y el VIH, prostitución infantil, embarazos en adolescentes y a veces en niñas, familias incompletas, y muchos más que afectan en mayor parte a nuestros adolescentes y jóvenes, producto de lo que ya mencioné: el hacer de la sexualidad humana, desde temprana, edad un juguete más para nuestra diversión.

Los que argumentan que abortar o no es sólo cuestión de decisión, tienen como cierto que el cigoto formado después de la fecundación no constituye propiamente una vida humana, entonces al deshacerse de él no se hablaría de homicidio; al respecto hay que recordar que los juicios morales de un individuo orientan su actitud, la cual jerarquiza los aspectos posibles de la vida y la conducta humana en cualquier circunstancia; en esto se sustentan sus acciones, que ya se pueden juzgar como morales o inmorales. Pero lo que olvidan al respecto es que se trata de una ley de la naturaleza, una ley universal a la que se le dan vueltas con el objeto de usar a conveniencia.

Todo esto suena paradójico: en 1973 México ganó el festival OTI Internacional celebrado en Belo Horizonte, Brasil, con una canción de Sergio Esquivel llamada “Qué alegre va María”, interpretada por la mexicana Imelda Millar. La canción habla de una mujer embarazada que camina alegre por la calle platicando con su niño que aún no nace; y actualmente, en el mismo país, grupos ideológicos luchan por borrar completo esta imagen y cambiar figuradamente la letra de esta hermosa canción. María ya no está alegre, ni espera a su bebé con ansia: María camina por la calle y toma unas pastillas; entonces sí, ya va a estar alegre.



CONCILIÁBULO


A la basílica de Guadalupe

El 25 la diócesis de Xalapa hace su peregrinación anual a la basílica de Guadalupe. Este año la acompaña por última vez monseñor Sergio Obeso Rivera, el obispo emérito, en su calidad de “administrador apostólico” mientras llega el nuevo obispo electo, Hipólito Reyes Larios.



Culturas precolombinas, o indígenas, y fe cristiana

“Este papel (de la Iglesia católica en América Latina) sigue siendo primario, también gracias a la fusión entre la antigua y rica sensibilidad de los pueblos indígenas con el cristianismo y con la cultura moderna. Como sabemos, algunos ambientes afirman un contraste entre la riqueza y profundidad de las culturas precolombinas y la fe cristiana presentada como una imposición exterior o una alienación para los pueblos de América Latina. En verdad, el encuentro entre estas culturas y la fe en Cristo fue una respuesta interiormente esperada por estas culturas.
Por tanto, no hay que renegar de ese encuentro, sino que se ha de profundizar: ha creado la verdadera identidad de los pueblos en América Latina.”

Unidad latinoamericana vs Globalización y mundo unipolar dirigido por Estados Unidos
(Habéis puesto de relieve)… Algunos desafíos que la Iglesia afronta en la vasta área latinoamericana, insertada en las dinámicas mundiales y cada vez más condicionada por los efectos de la globalización. Ante este desafío, las naciones que la componen tratan de afirmar, de diversas maneras, su identidad y su peso en el camino histórico del mundo de hoy; a menudo en medio de muchas dificultades, tratan de consolidar la paz interna de su nación.
Sintiéndose “hermanas” quieren llegar ser también una comunidad, unida en la paz y en el desarrollo cultural y económico.”

(Benedicto XVI a los nuncios de América Latina, 17 febrero, 2007)



Un hombre que alababa a Dios

En Coatepec, en concreto en la rectoría de Fátima, están tristes por la muerte del P. Edilberto García. El P. Edilberto había nacido en Tepetlán, Veracruz. Su papá era director de la orquesta o banda del pueblo y en toda la vida el padre García tuvo una maravillosa voz y ayudó a todas las comunidades para alabar a Dios.

En los últimos años se incorporó al movimiento de la “Llama de amor” y llegó a ser su director nacional. Estos movimientos o grupos que algún autor llama “sectas dentro de la iglesia” están haciendo un gran bien. El P. Edilberto García trabajaba con mucho entusiasmo por este movimiento de la “llama de amor del inmaculado corazón de María” que nos había llegado desde Hungría. Muchas personas han renovado su fe y su amor a la iglesia y a la Virgen María a través de estos cenáculos o grupos.

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