Domingo 8 de octubre de 2006

Plana semanal del Seminario Arquidiocesano de Xalapa, Ver. MÉXICO
Desde el año 2000
Aparece en el Diario de Xalapa


E D I T O R I A L


La sana critica
Aceptar de forma automática todo cuanto se dice o rechazar expeditamente todo lo que se propone son las actitudes que se pueden vivir cuando se pierde de vista uno de los valores muy humanos: la sana crítica. Esta actitud humana, se tiene que vivir en colaboración humilde por parte de todos para conciliar posiciones enfrentadas que inevitablemente vivimos en nuestra sociedad actual. Siempre han existidos hombres y mujeres que han encarnado esta actitud de sana crítica. Ellos han sido un ejemplo modélico de humanistas integrales preocupados por el destino del hombre contemporáneo, espíritus sensibles a toda suerte de valores y humildemente preocupados por promover la cultura que eleve la dignidad de los personas.



Acercándonos a su espiritualidad
JOSÉ LUIS ALVARADO JÁCOME

La doctrina y los conocimientos que se tienen de Dios deben vivirse e insertarse en la vida cotidiana y no solamente en los ratos en que se asiste a las celebraciones religiosas. Para poder decir que alguien está viviendo una espiritualidad (que se puede entender como la forma personal en que se asumen en la propia cotidiana los valores presentados por Jesucristo), es necesario verificar de qué manera vive su fe, de qué manera vive su relación con los demás. Desde luego, cimentado en ideas precisas, en la enseñanza cristiana que da testimonio de Jesucristo como el centro de la vida. Así lo hizo Rafael Guízar Valencia desde que comprendió que su vocación era llevar a Dios a las personas y llevar a las personas a Dios.

Como pastor y guía de las almas enseña una doctrina para alcanzar el cielo que la desarrolla en los siguientes puntos:

En los sermones de las misiones que organizaba.- Mediante el conocimiento de la Sagrada Escritura, por eso repartió miles (se cuenta que hasta millones) de ejemplares de los cuatro Evangelios. Le urge que se conozca la persona y doctrina de Jesucristo.
En las catequesis que van adjuntas a los ejemplares de los cuatro Evangelios y en los demás escritos pastorales, como las cartas que escribe a sus hijos en el periodo de persecución.

En la formación de santos y sabios sacerdotes que le ayuden a proseguir esta tarea que Dios le encomendó como Obispo.

Con su propio testimonio de vida. Medio muy poderoso con el que incendió miles de corazones con el mismo fuego divino que una vez encendió al suyo.

Su objetivo es lograr que los cristianos (y aún los que no aceptaban a Dios) colocaran en la balanza su propia vida y lo que Dios propone. El Espíritu Santo iluminará a las personas que se abren a ese encuentro con Dios, así serán capaces de conocer sus errores para llegar a una conversión personal. Su arrepentimiento de aquél pecado los llevará a solicitar el perdón mediante el sacramento de la reconciliación. Así Dios da siempre una nueva oportunidad a todo aquél que se acerca con corazón sincero.

El amor se paga con amor y el resultado es un cambio de estilo de vida. Don Rafael propone a sus fieles lo que él a la vez vive día con día. Las acciones que recomienda son las siguientes:

Conocer profundamente a Dios para amarlo más. El lugar de encuentro especial: la oración diaria en forma personal y comunitaria.

Realizar pequeños gestos de amor mediante novenas, la adoración a Jesucristo Eucaristía, algunas veladas de oración que les proponía para interceder por las necesidades diocesanas; el rezo especialísimo a la Virgen María (la gran intercesora ante su hijo Jesús) mediante el Rosario. De la misma manera, recurrir a los santos es de gran ayuda, sobre todo Santa Teresita del Niño Jesús a quien puso como patrona del Seminario.

Resolver en la medida de las posibilidades, las necesidades materiales de aquellas personas que les es imposible por sus propias capacidades con ayudas económicas, materiales, alimentos y palabras de consuelo uniéndose a sus sufrimientos.

Ser agradecidos con Dios por todos los beneficios.

Llevar a los demás estas enseñanzas, convertirse en verdaderos discípulos de Jesús, pertenecer al ejército de Cristo que combate en el mar de la vida.

Cargar con la cruz de Cristo. Los sufrimientos son oportunidades para unirse a la redención de la humanidad mediante el sacrificio de Jesucristo, es un maravilloso medio de purificación y a la vez de santificación personal y comunitaria.

Sobre todo, amar muchísimo a Dios, de ahí brota el ser y quehacer de los verdaderos hijos de Dios.

Ahora, ¿Basta con conocer la espiritualidad de este “gigante de la caridad”? ¿Por qué no se atreve a iniciar este camino señalado por Cristo y enseñado por Don Rafael Guízar? Lo único que se puede perder es el pecado, tan arraigado en nuestros días y tan molesto para la verdad, la paz y la justicia.



Una loca en busca de la alegría
JAIME RUÍZ CONTRERAS

Una loca, tan antigua como la humanidad, cansada del relativismo de su tiempo, y sabedora que el hombre es historia y que la vida es un transcurso en el cual cada instante es una decisión radical entre la plenitud y lo efímero, decidió indagar, entre los más ilustres, la esencialidad de lo que el hombre llama “Valores”.

Suspendida en el tiempo preguntó ¿qué es la alegría? La alegría es una manifestación de los dioses, responde Tales de Mileto. Creo que no -respondió Anaximandro- por que la alegría tiene su fin cuando llega la tristeza, por tanto, no puede venir de los dioses a menos que los dioses sean finitos. La alegría es el resultado de la armonía de los opuestos, dijo Heráclito, ya que alegría y tristeza son la misma cosa en diferente proporción. Claro -agregó Pitágoras- la alegría es el concepto rítmico y armónico de la felicidad lo mismo que la tristeza.

En la base de la alegría está la misma sustancia que se encuentra en toda la realidad, esto es, una partícula indivisible, por ello la alegría también es indivisible, replicó Demócrito, y no la armonía de los contrarios como ustedes afirman. No amigos -dijo Protágoras- en la base de la alegría está una sensación que es diferente en cada persona por ello la alegría es relativa a la experiencia. Creo que la alegría es la mayor de las virtudes, propuso Sócrates, por ello procede del espíritu y no de la experiencia. La alegría del alma forma los bellos días de la vida, en cualquier época que sea.

La alegría por ser trascendente se encuentra en una ciudad diferente a la terrestre allí donde el rey es la verdad, la ley es el amor y éste trae consigo alegría, su duración es la eternidad dijo Agustín de Hipona. No creo -dijo Guillermo de Ockham- yo sólo sé lo que es la alegría cuando la experimento. La alegría es una realidad que, como todo lo que viene en la naturaleza, está en espera que el hombre la descubra, la observe, la estudie y la penetre en sus secretos -afirmó Da Vinci. ¿Cómo la podrá penetrar si el hombre está tan esclavizado por el pecado que es incapaz de realizar un esfuerzo tal? refutó Calvino.

¡Cuidado! afirmó Descartes, si queremos conocer algo, debemos evitar la precipitación y el prejuicio, debemos proceder con claridad y distinción. Creo, dijo Rousseau, que el hombre ha nacido libre y alegre y por todas partes está encadenado y esto le provoca infelicidad y tristeza.

Para mí la alegría es parte fundamental de lo estético -replicó Kant. La alegría es piedra filosofal que todo lo convierte en oro, agregó Benjamín Franklin. ¡Claro! Porque la alegría está en la lucha, en el esfuerzo, en el sufrimiento que supone la lucha, y no en la victoria misma, dijo Mohandas Karamchand Gandhi. Aunque tendré que decir que el hombre se complace en enumerar sus pesares, pero no enumera sus alegrías -agregó Dostoiewsky. Pues sí, porque se necesita ser sabio para no sentarse a lamentarse, y ponerse alegremente a la tarea de reparar el daño hecho dijo William Shakespeare. Pienso, dijo Martín Descalzo que la felicidad y la alegría dependen de estar en armonía consigo mismo, con los demás, con el mundo y con Dios. Además, agregó Adolfo Kolping, el alma humana se revela profundamente no sólo en el dolor sino también en la alegría. Para mí, dijo Teilhard de Chardin, entre todas las alegrías, la alegría de vivir es el más grande poder cósmico.

Creo, dijo Johann Wolfang Goethe, que después de la virtud es la alegría lo más indispensable. Todos los días deberíamos leer un buen poema, oír una linda canción, contemplar un bello cuadro y pronunciar algunas bellas palabras; además, alegría y amor son las alas de las grandes empresas. Claro, dijo Michel Quoist, Dios es alegría, si te entregas a Dios te entregas a la alegría ¡Claro Amigos! suplicad a Dios que os conceda el don de la alegría. Sed alegres como los niños y como los pájaros del cielo agregó Fëdor Mikhailovich Dostoievski. Es verdad que Dios es alegría, pero también es verdad que hay alegría en ser sano y justo; pero hay, sobre todo, la inmensa alegría de servir, agregó Gabriela Mistral.

Creo haber entendido, dijo la locura, la alegría es una virtud del alma tan profunda que sólo la concede Dios y se manifiesta cuando me pongo al servicio de los demás… o ¿no? amigo lector.



La cara de Dios
JOSÉ ROGELIO RUEDA RIVERA

Dos fueron los estadounidenses que este año obtuvieron el Premio Nobel de Física, John Mather y George Smoot. Se cree que puede ser el descubrimiento no sólo más importante del siglo, sino de los últimos tiempos.

Ambos hicieron un aporte a la cosmología científica, en una teoría en la que hasta ahora nadie había podido mostrar pruebas contundentes; se trata de las primeras lecturas de la forma del cuerpo oscuro y la anisotropía de la radiación cósmica de fondo, que obtuvieron con la ayuda de los satélites americanos COBE, y el WMAP.

La radiación cósmica de fondo es un remanente de las primeras fases de la formación de universo, que fue descubierta en 1964; es como si todo el universo estuviera metido en un gigantesco horno lleno de radio frecuencias provenientes de todas las direcciones.

Lo que lograron estos dos investigadores fue medir estas radiofrecuencias y su temperatura, gracias a lo cual sabemos ahora con exactitud que la gran explosión sucedió hace 13 mil millones de años, y no en 15 mil millones, como se había estimado con anterioridad; y que si en ese entonces la temperatura había alcanzado un máximo de 3 mil grados centígrados, actualmente la temperatura es de apenas 2 grados sobre el cero absoluto.
Estos trabajos terminan por confirmar radicalmente la teoría del Big Bang, propuesta por un sacerdote y astrónomo belga llamado Georges Lemaitre, en el año de 1927; posteriormente reforzada con el descubrimiento de la radiación cósmica de fondo en 1964, y ahora decididamente confirmada por Mather y Smoot.

Lo interesante de todo esto fue una declaración hecha por el mismo Smoot, al presentar hace algunos años un primer mapa de la radiación cósmica de fondo diciendo: “Esta es la cara de Dios”.

Muchas veces se ha tenido la idea de que los científicos son personas ateas e insensibles, pero si analizamos la historia nos podemos llevar una gran sorpresa. Las motivaciones de la mayoría de los científicos para sus investigaciones podrían ser muy cercanas a las cuestiones de la fe: ¿Por qué existimos? ¿Quién nos creó?

Así, se puede leer esta frase: “Quien busca las causas y los principios primeros, debe necesariamente encontrar a Dios porque Dios es la causa y el primer principio por excelencia”, podemos imaginar a un santo como su autor, cuando en realidad fue Aristóteles; o esta otra: “Un poco de ciencia aleja de Dios, mucha ciencia acerca de nuevo a Dios” de Louis Pasteur.

Los hombres de ciencia buscan; buscan por su parte y sus métodos las verdades de Dios, y en su caminar se han formulado grandes hipótesis que nos acercan cada vez más al conocimiento intrínseco de la realidad en que vivimos. Einstein, Darwin, Newton, fueron sólo algunos que demostraron poseer un hambre casi insaciable de un conocimiento pleno y verdadero, al que muy bien podríamos llamarle Dios.

¿Qué tanto falta por descubrir? ¿Cuándo será el día en que nos acercaremos a la verdad?




C O N C I L I Á B U L O

A Trento
El padre José Benigno Zilli estuvo en la provincia Autónoma de Trento, para la presentación de su libro bilingüe sobre el tema en el que se le considera especialista. Se trata de la obra: “La cooperativa de emigración agrícola trentina san Cristóforo (1921-1925)”, en colaboración con el Mtro. Renzo Tommasi de la Universidad de Trento. Los habitantes de aquella provincia pensaron que el padre Zilli, era un italiano que misionaba en México. Sin embargo, los que lo conocemos sabemos que es un mexicano que investiga sus raíces italianas y ahora las pone en común.


Concierto de guitarras
En el marco de las festividades de la canonización de San Rafael Guízar Valencia, se presentó en las instalaciones del Seminario Mayor de Xalapa el grupo de Guitarras Clásicas de la Universidad Veracruzana el pasado 5 de 0ctubre a las 21:00hrs.


Virtudes cristianas
El viernes 6 de octubre se llevó a acabo la tarde de equipo de vidas, cuyo tema fue: “Virtudes humanas de Mons. Guízar”. En esta ocasión el expositor fue el Pbro. Lic. Luis Acosta Medrano, Vicario Episcopal de Vida Consagrada de nuestra Arquidiócesis.


Revista Mensaje: Edición especial
Hoy se estará llevando acabo la venta de revista Mensaje que el Seminario de Xalapa publica bimestralmente. En esta ocasión es una Edición Especial cuyo tema central es San Rafael Guízar Valencia. La venta se esta realizando en las diócesis Córdoba y de Xalapa.


Un nuevo encuentro
El próximo miércoles 11 de octubre se llevará a acabo la presentación del libro “Ratzinger y Juan Pablo II: la Iglesia entre dos milenios”. Los ponentes serán los presbíteros Eliseo Muñoz Colorado, Jaime Ruiz Contreras y José Benigno Zilli.



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