Plana semanal del Seminario Arquidiocesano de Xalapa, Ver. MÉXICODesde el año 2000
Aparece en el Diario de Xalapa
E D I T O R I A L
¿Qué sigue después?
“Se dice que después de la agitación viene la calma”. Hemos vivido un acontecimiento a nivel internacional: la canonización de san Rafael ¿Qué sigue después? Seguir caminando en medio de todos los acontecimientos favorables y no favorables que se van sucediendo en nuestra sociedad. Se trata de un caminar lleno de esperanza que nos anime a enfrentar con valentía y optimismo los acontecimientos que estar por llegar: cierre de un gobierno e instalación de otro nuevo. Es verdad que nunca ha sido fácil ser mexicano, pero ahora más que nunca tenemos la posibilidad de enfrentar unos sucesos que puedan marcar la historia de México si los afrontamos con seriedad y responsabilidad.
El gran reto: seguir su ejemplo
-Entrevista al Rector del Seminario-
JUAN ANTONIO ESCOBEDO JIMÉNEZ
El Seminario Arquidiocesano de Xalapa, se ha llenado de gracias y bendiciones de parte de Dios por la canonización de su santo patrono Rafael Guízar y Valencia. Es por ello que entrevistamos al rector del Seminario, padre Roberto Reyes Anaya.
Padre Roberto, para usted, como rector del seminario, ¿qué ha significado el acontecimiento de la canonización de San Rafael? –Una gran alegría, un sano orgullo y una gran responsabilidad. Una grandísima alegría por esta bendición con que Dios distingue al pueblo mexicano y, de modo particular, a nuestra arquidiócesis. Un sano orgullo por ser el seminario que tiene por protector a este gran santo que nos ilumina con su ejemplo y nos acompaña con su intercesión. Una gran responsabilidad pues a quien más se le da más se le pedirá, dice el Señor. Y a nosotros nos ha bendecido con esta canonización y, por lo tanto, somos los primeros que debemos esforzarnos por imitar su ejemplo.
Por otra parte padre, ¿cuáles son las perspectivas que nacen ante dicho acontecimiento? -Debemos pasar de la alegría y gozo que se ha desbordado en nosotros al compromiso por seguir su ejemplo, sobre todo en su amor por el seminario y la santificación de los sacerdotes. A los formadores nos corresponde seguir siendo generosos en nuestro ministerio de atención y acompañamiento a quienes se forman en nuestra institución, sabiendo que si bien es importante la sabiduría lo es igualmente el testimonio. Los seminaristas deberán ser dóciles en su formación y generosos en la entrega de sus vidas para que vayan alcanzando el gran deseo de san Rafael: “aspirar a ser santos y sabios sacerdotes”.
Padre, se podría hablar de algunos cambios que traiga al seminario la canonización. –Mira, afortunadamente, desde hace ya algunos años, el seminario cuenta con su plan de formación y éste ha tratado de seguir las enseñanzas y espiritualidad de nuestro santo. Mas bien, habrá que seguir reforzando algunos aspectos que el mismo San Rafael pedía: esforzarnos por dar una mejor preparación académica; intensificar una verdadera espiritualidad que brote de la Eucaristía; intensificar el amor y veneración a María Santísima; organizar adecuadamente las misiones que los seminaristas realizan en verano; permanecer en apertura para recibir seminaristas de otras diócesis.
Es necesario, igualmente, aprovechar el gozo presente para motivar a nuestra comunidad para cada uno de sus miembros no deje de aspirar a la santidad. Sin duda que todas estas festividades ayudarán también a que la comunidad diocesana conozca y se interese aún más por nuestro seminario y no deje de apoyarlo en sus necesidades.
Ante la homilía de monseñor Sergio Obeso ¿cuáles cree que sean los nuevos retos que el seminario debe enfrentar? -Que mayor reto podemos tener que aquel que monseñor Obeso expresa en la oración de acción de gracias, “entregar a la Iglesia sacerdotes sabios y santos”, que sean verdaderos soldados de Cristo que lleven almas al cielo por medio de su palabra, pero, ante todo, con el testimonio de una vida santa. Una gran tarea que los formadores tenemos y que los fieles piden ver cumplida. Para esta gran tarea, tenemos también un gran intercesor y sabemos que no nos dejará desamparados.
Por último, padre Roberto, sabemos que es usted un gran devoto de San Rafael ¿qué es lo que ha estimulado tal devoción? -Desde niño crecí escuchando anécdotas de su vida y su fama de santidad. Todavía me tocó prepararme a la Primera Comunión con su catecismo a base de preguntas. Sin embargo, fue hasta que entré al seminario que me interesó su vida y espiritualidad pues constantemente en la formación se nos refería a él. Me ha inquietado su amor por los pobres, su gran celo por la salvación de las almas y la importancia dada al seminario. Espero, con su intercesión y nuestro esfuerzo, que el seminario siga los pasos de quien ahora tiene como protector allá en el cielo.
Conozcan a las ovejas
-Exhorta Mons. Obeso a seminaristas-
ALAN NELSON MARTÍNEZ TREJO
El pasado 24 de octubre, en la festividad de monseñor Rafael Guízar, su primera fiesta como santo, a las 8:00 AM. dio inicio la Celebración Eucarística presidida por Mons. Sergio Obeso en la Catedral Metropolitana de Xalapa. La Acción de Gracias fue en particular con la presencia de seminaristas e institutos de vida consagrada. Todos ellos, seminaristas, religiosos y religiosas, al igual que toda la grey católica, están muy agradecidos con el Señor por darle a la Iglesia un nuevo santo.
En la homilía que pronunció monseñor Obeso, invitó al Seminario a que su formación sea siempre en miras a “ser pastores que conozcan a las ovejas por su nombre”, es decir, saber cuáles son las preocupaciones actuales del pueblo de Dios. También los exhortó a estar al día en información actual; a ser como el Buen Pastor que da la vida por sus ovejas.
A los institutos de vida consagrada les invitó a tener, a imitación de san Rafael, un amor preferencial por lo pobres, los marginados y los más despreciados.
A los laicos los invitó a vivir la fe en sus familias y a realizar adecuadamente sus labores.
Al final de la Eucaristía don Sergio impartió la bendición con una reliquia de san Rafael Guízar.
Benedicto XVI eliminará el Limbo
CÉSAR ROMERO GALÁN
Hace unos días apareció esta noticia en el diario, y daba la sensación de que el actual Pontífice estaba tomando una decisión muy grave, incluso que tocaba algo esencial a la fe de la Iglesia.
Sin embargo, creo que nos debemos ahorrar todo sensacionalismo y ser más precisos en estos temas, sobre todo porque están arraigados en nuestras gentes.
Como punto de partida debemos decir que el tema del limbo (palabra que significa “límite”) no se encuentra ni en la Biblia ni en la Tradición antigua de la Iglesia, sino que nació posteriormente, hacia inicios de la Edad Media, como respuesta a la enseñanza de que sólo con el Bautismo y las buenas obras se puede alcanzar la salvación. Se veía un problema difícil de resolver el caso de los niños de creyentes muertos sin ser bautizados y de las personas con deficiencias mentales. Unas carecían del Bautismo, otras de buenas obras, ¿a dónde irían? No podían estar ni en el cielo ni en el infierno. Entonces estarían en un estado intermedio, donde no sufrirían, pero tampoco gozarían, estarían “sin pena ni gloria”.
Durante mucho tiempo se ha conservado, en algunos sectores de la Iglesia como algo válido la existencia de este estado, pero un gran número de teólogos lo ha rechazado, ya que carece de sustento doctrinal. Varios Papas y Catecismos lo presentan como doctrina oficial de la Iglesia, pero últimamente se ha visto la necesidad de aclarar esto.
No significa corregir la fe de la Iglesia, como si se tratara de quitar un dogma definido por la misma Iglesia; si no de aclarar un punto doctrinal que no estaba bien preciso. Nunca ha pertenecido al conjunto de verdades establecidas y proclamadas por la Iglesia, como lo son el cielo, el purgatorio y el infierno; más aun, se sostiene que sólo estos tres estados son los proclamados por la fe.
Pero, ¿qué pasará con dichas personas?, ¿no podrán gozar de la salvación? Los mismos teólogos, empezando desde los Padres de la Iglesia, sobre todo san Agustín, han sostenido que la salvación le pertenece a Dios y que él sabe como lleva a cabo sus designios. Este gran misterio se encierra en su bondad y sabiduría, y hasta allá no podemos llegar con nuestra razón. Siempre es sano dejarle un amplio espacio al profundo misterio de Dios.
De allí que sea sano, para el mayor provecho y crecimiento de los fieles, que las verdades reveladas se vayan aclarando poco a poco. No debemos olvidar que la nuestra es una fe que toma en cuenta el estado peregrino del hombre, en el cual va conociendo poco a poco a su Creador.
El pasado 24 de octubre, en la festividad de monseñor Rafael Guízar, su primera fiesta como santo, a las 8:00 AM. dio inicio la Celebración Eucarística presidida por Mons. Sergio Obeso en la Catedral Metropolitana de Xalapa. La Acción de Gracias fue en particular con la presencia de seminaristas e institutos de vida consagrada. Todos ellos, seminaristas, religiosos y religiosas, al igual que toda la grey católica, están muy agradecidos con el Señor por darle a la Iglesia un nuevo santo.
En la homilía que pronunció monseñor Obeso, invitó al Seminario a que su formación sea siempre en miras a “ser pastores que conozcan a las ovejas por su nombre”, es decir, saber cuáles son las preocupaciones actuales del pueblo de Dios. También los exhortó a estar al día en información actual; a ser como el Buen Pastor que da la vida por sus ovejas.
A los institutos de vida consagrada les invitó a tener, a imitación de san Rafael, un amor preferencial por lo pobres, los marginados y los más despreciados.
A los laicos los invitó a vivir la fe en sus familias y a realizar adecuadamente sus labores.
Al final de la Eucaristía don Sergio impartió la bendición con una reliquia de san Rafael Guízar.
Benedicto XVI eliminará el Limbo
CÉSAR ROMERO GALÁN
Hace unos días apareció esta noticia en el diario, y daba la sensación de que el actual Pontífice estaba tomando una decisión muy grave, incluso que tocaba algo esencial a la fe de la Iglesia.
Sin embargo, creo que nos debemos ahorrar todo sensacionalismo y ser más precisos en estos temas, sobre todo porque están arraigados en nuestras gentes.
Como punto de partida debemos decir que el tema del limbo (palabra que significa “límite”) no se encuentra ni en la Biblia ni en la Tradición antigua de la Iglesia, sino que nació posteriormente, hacia inicios de la Edad Media, como respuesta a la enseñanza de que sólo con el Bautismo y las buenas obras se puede alcanzar la salvación. Se veía un problema difícil de resolver el caso de los niños de creyentes muertos sin ser bautizados y de las personas con deficiencias mentales. Unas carecían del Bautismo, otras de buenas obras, ¿a dónde irían? No podían estar ni en el cielo ni en el infierno. Entonces estarían en un estado intermedio, donde no sufrirían, pero tampoco gozarían, estarían “sin pena ni gloria”.
Durante mucho tiempo se ha conservado, en algunos sectores de la Iglesia como algo válido la existencia de este estado, pero un gran número de teólogos lo ha rechazado, ya que carece de sustento doctrinal. Varios Papas y Catecismos lo presentan como doctrina oficial de la Iglesia, pero últimamente se ha visto la necesidad de aclarar esto.
No significa corregir la fe de la Iglesia, como si se tratara de quitar un dogma definido por la misma Iglesia; si no de aclarar un punto doctrinal que no estaba bien preciso. Nunca ha pertenecido al conjunto de verdades establecidas y proclamadas por la Iglesia, como lo son el cielo, el purgatorio y el infierno; más aun, se sostiene que sólo estos tres estados son los proclamados por la fe.
Pero, ¿qué pasará con dichas personas?, ¿no podrán gozar de la salvación? Los mismos teólogos, empezando desde los Padres de la Iglesia, sobre todo san Agustín, han sostenido que la salvación le pertenece a Dios y que él sabe como lleva a cabo sus designios. Este gran misterio se encierra en su bondad y sabiduría, y hasta allá no podemos llegar con nuestra razón. Siempre es sano dejarle un amplio espacio al profundo misterio de Dios.
De allí que sea sano, para el mayor provecho y crecimiento de los fieles, que las verdades reveladas se vayan aclarando poco a poco. No debemos olvidar que la nuestra es una fe que toma en cuenta el estado peregrino del hombre, en el cual va conociendo poco a poco a su Creador.
C O N C I L I Á B U L O
Himno a San Rafael
El Lic. Aristeo Rivas Andrade ha hecho un himno a san Rafael Guízar Valencia. Y el maestro Ryszard Siwy le ha puesto música. Siwy es el mismo que puso música al himno de Veracruz. El Lic. Aristeo Rivas Andrade tiene el don de la literatura y de la poesía y el himno que compuso llegará a las comunidades. El estribillo es el siguiente:
El Lic. Aristeo Rivas Andrade ha hecho un himno a san Rafael Guízar Valencia. Y el maestro Ryszard Siwy le ha puesto música. Siwy es el mismo que puso música al himno de Veracruz. El Lic. Aristeo Rivas Andrade tiene el don de la literatura y de la poesía y el himno que compuso llegará a las comunidades. El estribillo es el siguiente:
¡Oh Santo Apóstol del pueblo,
escucha la alabanza y la alegría
de tu gente que hoy te ve en el cielo
al pie de la virgen María.
Benedicto XVI y la modernidad
“El cristianismo –subrayó el Papa- está abierto a todo cuanto es justo, verdadero y puro en las culturas y las civilizaciones (...) Los discípulos de Cristo reconocen por lo tanto y acogen de buen grado los valores auténticos de la cultura contemporánea, como los conocimientos científicos y el desarrollo tecnológico, los derechos humanos, la libertas religiosa y la democracia”. Pero, conscientes de la “fragilidad humana, (...) no se olvidan de las tensiones interiores y las contradicciones de nuestra época. Por eso, la obra de evangelización no es una simple adaptación a las culturas, sino también y siempre una purificación (...) que favorece la madurez y el saneamiento”.
Misa de gracias
El próximo martes 31 de octubre la Arquidiócesis de Xalapa estará de manteles largos por la Misa de Acción de Gracias por la canonización de san Rafael Guízar Valencia. Ya que contara con la presencia de Obispos mexicanos, seminaristas, sacerdotes, religiosas, fieles de Cotija, Mich., autoridades civiles y familiares del santo. Y con la participación de miles de fieles de nuestra Arquidiócesis y de otras que nos visitarán.
Aniversario de nuestro Obispo
Unida con la Misa de Acción de Gracias del 31 de octubre, el Señor Arzobispo Don Sergio Obeso Rivera, festejará su Aniversario Sacerdotal y su cumpleaños. Con gran alegría el Seminario Arquidiocesano de Xalapa y el Consejo Editorial de Concilio felicitan a su Padre y Pastor.
¡Felicitaciones!
Nos han llegado felicitaciones de otros lados de la república mexicana de sacerdotes, religiosos(as) y seminaristas por motivo de la Canonización de San Rafael Guízar Valencia:
“Nuestro nuevo santo fue un gran misionero, además compuso un catecismo que todavía se usa para la instrucción de los niños a quienes amaba mucho. Demos gracias a Dios por este testimonio junto con su ejemplo de apóstol y de evangelizador” (Pbro. Joaquín Muñoz, Tlaxcala, Pue.)
“Felicidades a la Arquidiócesis de Xalapa y en especia al Seminario por la gracia que el Señor les ha concedido por la Canonización de Mons. Guízar y Valencia” (Fray Eduardo Jiménez, Guadalajara, Jal.)
“Muchas felicidades por este regalo del cielo, un santo para Xalapa” (Hna. Lucia Vanegas, México, D.F.)
“Felicidades por el don que nuestro Padre Dios ha concedido a la Iglesia Universal y en especial a la Iglesia de Xalapa, un santo que amó a la Eucaristía y se preocupó por los pobres” (Sem. Jorge Jiménez, Queretaro, Qro.)
“El cristianismo –subrayó el Papa- está abierto a todo cuanto es justo, verdadero y puro en las culturas y las civilizaciones (...) Los discípulos de Cristo reconocen por lo tanto y acogen de buen grado los valores auténticos de la cultura contemporánea, como los conocimientos científicos y el desarrollo tecnológico, los derechos humanos, la libertas religiosa y la democracia”. Pero, conscientes de la “fragilidad humana, (...) no se olvidan de las tensiones interiores y las contradicciones de nuestra época. Por eso, la obra de evangelización no es una simple adaptación a las culturas, sino también y siempre una purificación (...) que favorece la madurez y el saneamiento”.
Misa de gracias
El próximo martes 31 de octubre la Arquidiócesis de Xalapa estará de manteles largos por la Misa de Acción de Gracias por la canonización de san Rafael Guízar Valencia. Ya que contara con la presencia de Obispos mexicanos, seminaristas, sacerdotes, religiosas, fieles de Cotija, Mich., autoridades civiles y familiares del santo. Y con la participación de miles de fieles de nuestra Arquidiócesis y de otras que nos visitarán.
Aniversario de nuestro Obispo
Unida con la Misa de Acción de Gracias del 31 de octubre, el Señor Arzobispo Don Sergio Obeso Rivera, festejará su Aniversario Sacerdotal y su cumpleaños. Con gran alegría el Seminario Arquidiocesano de Xalapa y el Consejo Editorial de Concilio felicitan a su Padre y Pastor.
¡Felicitaciones!
Nos han llegado felicitaciones de otros lados de la república mexicana de sacerdotes, religiosos(as) y seminaristas por motivo de la Canonización de San Rafael Guízar Valencia:
“Nuestro nuevo santo fue un gran misionero, además compuso un catecismo que todavía se usa para la instrucción de los niños a quienes amaba mucho. Demos gracias a Dios por este testimonio junto con su ejemplo de apóstol y de evangelizador” (Pbro. Joaquín Muñoz, Tlaxcala, Pue.)
“Felicidades a la Arquidiócesis de Xalapa y en especia al Seminario por la gracia que el Señor les ha concedido por la Canonización de Mons. Guízar y Valencia” (Fray Eduardo Jiménez, Guadalajara, Jal.)
“Muchas felicidades por este regalo del cielo, un santo para Xalapa” (Hna. Lucia Vanegas, México, D.F.)
“Felicidades por el don que nuestro Padre Dios ha concedido a la Iglesia Universal y en especial a la Iglesia de Xalapa, un santo que amó a la Eucaristía y se preocupó por los pobres” (Sem. Jorge Jiménez, Queretaro, Qro.)
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