E D I T O R I A L
¡Gracias Papá!
… y no solamente por haberme dado tu espermatozoide y con ello el inicio de la vida. Como reza el adagio “padre no es el que engendra, sino el que cuida y forma”. Lamentablemente esta fecha se tiene en segundo lugar, quizá porque en estadística son las mujeres quienes están junto a sus hijos cuando sucede que el padre está ausente o no se quiere saber de él. Lo cierto es que el padre es el pilar de la familia (aunque lo manifiesta más la mamá), es la fortaleza, la ternura y comprensión manifestadas en la virilidad. Comercialmente ya están los cálculos de cuánto será la derrama económico en los diversos negocios y centros de entretenimiento, nosotros, lejos de eso, queremos felicitarlos y darlos honor a quien honor merece: aquellos papás dedicados, comprometidos y que son ejemplo para sus hijos y apoyo para su esposa.
I N T E R – N O S
Clases sociales
De acuerdo a datos de INEGI, el 59.13% de la población en México pertenece a la clase baja, el 39.16% a la clase media y sólo el 1.71% a la alta. Son preocupantes estos datos porque significa que más de la mitad de los hogares tienen problemas económicos que traen el no comer adecuadamente, el acceso a servicios, etcétera. Por otro lado, son mínimos los considerados como de “alta”, nos preguntamos por qué pulula tanta gente prepotente queriendo aparentar mucho más de lo que tiene. Eso no hace mejores personas.
Las lluvias
Tengan mucho cuidado con los fenómenos meteorológicos que ya tenemos. Las inundaciones están a la orden del día, los trabajos que se hacen para que “ya no se presenten” como que no han funcionado. También da coraje ver la basura atorada en las alcantarillas. Hay tantos inconscientes -por no decir otra palabra que se merecen- que se les hace tan fácil tirarla donde les place. Al final, todos pagamos por su incultura.
Nueva generación
Se abre la convocatoria para el nuevo ciclo escolar en la Facultad de Filosofía con corte Aristotélico-tomista con sentido humanista. Si hay alguien interesado se puede contactar al Instituto en el teléfono 840 79 59 para solicitar una entrevista con el Dr. José Luis Alvarado, Secretario Académico. Es una buena oportunidad para conocer la sabiduría humana y mediante un pensamiento crítico aportar lo mejor para nuestra civilización.

La educación personalista
POR JUSTINO ABDIEL RODRÍGUEZ CONDE
          El trabajo de tesina que durante este curso realicé lleva por título “La educación personalista en Emmanuel Mounier en su obra Manifiesto al servicio del Personalismo. Mounier fue un filósofo francés nacido en 1905 y fallecido en 1950 que vivió el período histórico conocido como “Entre guerras” (por la Primera y Segunda guerras mundiales); es a partir de esta experiencia que impulsa la corriente filosófica del Personalismo, la cual exige la defensa del valor de la persona frente a los colectivismos (como el nazismo) y el individualismo. 
Ante la situación educativa que se vive ahora en día, la propuesta  de la educación personalista de Mounier intenta despertar la conciencia de las personas para que sean capaces de vivir y comprometerse como tales en la comunidad donde viven. La educación impartida en las escuelas debe tomar en cuenta a la persona, es decir, los educadores –profesores- en sus aulas están frente a personas con derechos, con dignidad, con sentimientos, con un contexto familiar y comunitario, con problemáticas distintas; los alumnos no son simples receptores de conocimientos -que suelen ser a veces vacíos o inservibles para su verdadero desarrollo humano-, no son máquinas sin sentimientos  que se puedan programar.
La educación personalista propone que, más que enseñarle a los alumnos por separado o uno por uno, se les trate por igual, como personas. No importa el método educativo que se utilice (conductismo, tradicionalismo, constructivismo), sino que la educación debe despertar las conciencias para que el alumno, dándose cuenta de su situación, pueda transformarla positivamente y superarse no sólo estudiando para pasar exámenes o tener una carrera, sino para poder realizarse y perfeccionarse como persona desde su momento presente. La educación debe fijarse no sólo en la impartición de conocimientos, sino también como una educación para la libertad, para la acción en beneficio de la comunidad.   Se trata de concientizar a la persona de que es persona, con dignidad  y facultades que puede emplear para un progreso humano y espiritual, así se puede cambiar positivamente la sociedad y hacerla más agradable, más justa, más humana.   

 LA EDUCACIÓN personalista propone que, más que enseñarle a los alumnos por separado o uno por uno, se les trate por igual, como personas

Dignidad humana en  La Ciudad de Dios
POR CÉSAR JOEL MENDOZA SÁNCHEZ
          Elegí el tema de la dignidad humana para trabajar en mi proyecto de tesina, porque considero que esta palabra es muy empleada hoy día pero poco conocida, o mejor aún, reflexionada. En el trabajo que realicé me di a la tarea de investigar cómo usa este concepto el filósofo Agustín de Hipona en su obra “La Ciudad de Dios”.
La dignidad es un concepto que todos utilizamos, pero no nos damos cuenta que es un valor universal, gracias al cual se puede dar una mejor interacción entre los miembros de una sociedad. Al mismo tiempo es el valor que debemos defender por el hecho de poseerlo. Agustín, en medio del torbellino de ideas imperantes en las escuelas de su época, nos da ejemplo, con su vida y conversión, de cómo podemos corromper o cultivar esa dignidad que poseemos.
En la obra de San Agustín se vuelve interesante reconocer, y sobre todo señalar, la existencia de la dignidad que brilla en la vida de los que residen en “La Ciudad de Dios”. No debemos ir tan lejos y pensar que en la tierra o en nuestra realidad no la podremos vivir; he allí lo interesante.
Estas ciudades son reales (celeste y terrena) y existe toda una lucha entre ellas en el fluir de la historia;  el bien y el mal caminan juntos,  por ello es que la dignidad cumple un papel importante, puesto que lleva a la persona a la trascendencia que le hace ser diferente de las cosas materiales. En sentido analógico podemos decir que la ciudad terrena es una vivencia de egoísmo, por tanto sabemos que  nos encierra y no nos deja ver al prójimo, ver su valor, de ahí la importancia de rescatar la dignidad para salir del egoísmo propio de esta ciudad.
A lo que se nos invita en esta obra es a no desear el mundo, a no sobreponer lo material al hombre, sino superarlo. Y ¿en qué caemos cuando no es así?, en un sin sentido que nos lleva a vivir una vida pesimista, sin interés por la existencia y por la verdad. Por el contrario, cuando vivimos para el otro vivimos para nosotros mismos. En esta realidad crecemos como personas, como seres humanos.
Después de haber navegado dentro de la obra  “La Ciudad de Dios”- fruto del pensamiento de  Agustín y de su contexto- , puedo darme cuenta que la dignidad humana siempre ha existido y se ha aplicado con referencia a la divinidad. Además, pude percatarme que no se encuentra como tal el concepto de dignidad, sin embargo, aparecen luces que nos aclaran su contemplación, se presenta como ese faro con el que el hombre debe caminar en la vida.
También la persona debe responsabilizarse por sí misma, ya que puede ser ella quien se degrade con sus actitudes frente a la sociedad o con su incorrecta forma de vivir.
Hoy día nos damos cuenta que muchos trabajos han llevado al hombre a degradarlo; es aquí donde se alza la voz para ser cada vez más conscientes de la importancia de esta radiante defensora intrínseca en cada uno de nosotros.
En mi conclusión expreso que la persona humana se proyecta como tal, se desarrolla y crece solo valorando  al otro, a quien tiene a su lado. El filósofo Agustín nos muestra en estas figuras de ciudades dos realidades a escoger: aquella que nos destruya unos a otros (ciudad terrena), o aquella que nos hace más humanos, más trascendentes (ciudad celeste). La decisión de una humanidad mejor reside en nosotros.

Evangelizar con palabras y vida
POR LUIS ALBERTO SORCIA MARTÍNEZ
          Indudablemente todas las actividades que se realizan en el Seminario Mayor “San Rafael Guízar Valencia”, tienen el objetivo común de formar íntegramente a los aspirantes al sacerdocio en las cuatro diferentes áreas de formación: intelectual, humana, espiritual y pastoral; en esta última es en la que nos vamos a detener, pues el objetivo del presente sondeo es dar a conocer a todos nuestros lectores las actividades formativas que realizan los seminaristas en esta área, de manera especial en las misiones de verano, que durante un mes se realizan en las distintas diócesis. Por esto dejemos que los seminaristas sean los que comenten qué es lo que hacen en las misiones:

 JUAN DIEGO García López
“Realizamos muchas actividades: un visiteo de casas, atender algunos grupos parroquiales, algunas celebraciones de la Palabra,  Rosario, Hora Santa, visitar enfermos, entre otras cosas que vallan surgiendo según la necesidad de cada parroquia”.
 FRANCISCO CONTRERAS Sánchez
“Lo que un seminarista hace en la misión es precisamente salir para encontrarse con el hermano católico, intentamos cumplir con la tarea de evangelización, pero siempre recordando nuestro estilo de vida cristiano, para así poder presentar un  mensaje  con novedad, claridad y alegría”.

 JUAN FERNANDO Luna Melchor
“En las misiones de verano se dan catequesis para fortalecer el conocimiento doctrinal de los agentes de pastoral en las comunidades, así como acompañarles a una vivencia más cercana de la fe en Jesucristo”.
 JOSÉ ROBERTO Guillermín Rodríguez
“Lo primero es conocer a la gente, visitando las familias casa por casa, conocer cada persona, sus preocupaciones, sus necesidades, sus dificultades; y a partir de ahí  apoyar a las familias y motivarlas con la oración. Luego realizar actividades dentro de la Iglesia en donde se invite a toda la comunidad para convivir más de cerca”.
 RICARDO ESTEBAN López Luna
“Ayudar al párroco con la atención a los fieles en razón a la evangelización y catequesis, en actividades concretas como visitar casas para platicar con las familias. Reunirnos con los fieles para compartir alguna charla, participar de los sacramentos y actos de devoción junto con la comunidad. 
 JOSUÉ DAVID De la Cruz Morales
“El seminarista como futuro sacerdote y pastor, está llamado a vivir el Evangelio de Jesucristo con la gente de una comunidad en específico, está llamado a vivir desde ahora la experiencia que se da en la relación de ovejas con su pastor”.
FOTÓGRAFO: POR ISMAEL ROJAS LÓPEZ


ESTO YO NO LO SABÍA…
Reglamento para escuelas
POR DIEGO GARCÍA LÓPEZ
          El 18 marzo 1884 durante el gobierno de Manuel González, la Junta Directiva de Instrucción Pública, en uso de la facultad del art. 65 de la Ley Orgánica de Instrucción Pública de 1869, promulgó un reglamento interior para las escuelas primarias de niños y niñas, destinado a modernizar y uniformar la enseñanza y a adaptar las doctrinas y teorías a las necesidades e idiosincrasia nacional. Trata sobre las condiciones que deben tener los planteles, horarios escolares, distribución de tiempo, obligaciones del personal y currículo.
… PERO AHORA YA LO SÉ.

FRASE DE LA SEMANA
“Dime y lo olvido, enséñame y lo recuerdo, involúcrame y  lo aprendo”
Benjamín Franklin  


No hay comentarios.:

Publicar un comentario

sus comentarios nos ayudan