Domingo 06 de Junio de 2010








¡A misión!, y dejándolo todo lo siguieron
POR CASAS


E D I T O R I A L


Vocación




La palabra “vocación” incluye en sí misma cierto prestigio que no tiene, por ejemplo, la palabra “profesión”. La raíz etimológica de vocación está en el verbo latino vocare, que significa “llamar”: el que tiene una vocación ha sido llamado por alguien más alto para una determinada misión. Sabemos que mucha gente hace oración por las “vocaciones” y está pensando, de manera especial, en los jóvenes que habrán de ingresar al Seminario para llegar algún día a ser sacerdotes. También nosotros pensamos que se debe rezar por las vocaciones y tener particular cuidado de quienes tienen deseos o manifiestan voluntad de servir a Dios con toda su vida. Una vocación es una cosa muy grande y hay que procurarla y cuidarla, porque no viene de uno mismo sino de arriba.



C O N C I L I Á B U L O


¿Qué es un verdadero discernimiento?


En todo lo que atañe a la vocación, entra en juego lo que se llama el discernimiento. Discernir es discriminar o hacer a un lado todo lo superficial, o vano, para ver lo esencial y duradero. Es claro que el discernimiento es una actitud mucho más amplia y que casi coincide con la virtud de la prudencia pero, en el caso de las vocaciones, es particularmente necesario, porque uno fácilmente se cree llamado a grandes cosas, cosas ideales, cuando, en realidad, no tiene ni la energía ni las habilidades que serían necesarias.


El padre Alberto Zamora


Nos ha tocado ver al padre Alberto Zamora, llegado de Roma, donde reside habitualmente. Lo conocemos por ser el que trajo a Xalapa esas comunidades realmente admirables que se llaman de “catecúmenos”. El padre Alberto carga con la cruz de varias enfermedades, pero está en pie, porque lo ha dejado todo por seguir a Jesucristo.


Dos fotografías



Hemos visto dos fotografías hermosas de la primera comunidad de Catedral y de la primera comunidad del Calvario de los grupos de los catecúmenos. Fueron tomadas frente al Santo Sepulcro porque todas esas personas –que quizá jamás lo habían soñado- pudieron viajar a Tierra Santa como término de su enseñanza catecumenal. Son fotos en verdad hermosas donde están hermanos y hermanas que conocemos bien y que han perseverado a lo largo de muchos años en estas comunidades.


El escándalo



Varias personas nos han dicho que los escándalos son la perdición de la Iglesia. Pensamos que sí, que tienen razón, pero también pensamos que, por más escándalos que haya, siempre habrá gente que mira a Dios de frente y no se deja doblegar. Nos decían, por ejemplo, que nada menos que uno de los fundadores de la orden de los capuchinos se dio a la fuga y se hizo protestante. Pero no pasó nada, los capuchinos están ahí. Porque uno ha de tener una convicción más grande que los malos ejemplos que lo puedan confundir.


Mozomboa, recibe seminaristas misioneros


OBJETIVO, DAR A CONOCER Y REAFIRMAR LA FIGURA DEL SACERDOTE



POR JOSÉ CARLOS MORENO BARRERA



Hace una semana terminó sus labores el Seminario Arquidiocesano de Xalapa en el curso 2009-2010; sin embargo, hoy los seminaristas de la etapa de Filosofía estarán iniciando la llamada “Misión de verano”. Es por ello, que se acudió al presbítero Juan Beristain de la Santos, Vice-rector de Filosofía, para que compartiera el motivo de esta misión.




Cuando le preguntamos acerca del lugar en el cual se llevaría la misión el padre Juan, como se le conocer en el Seminario, amablemente respondió: “La misión de este año se estará realizando en la parroquia de la Inmaculada Concepción, Mozomboa, una de las parroquias de la zona costera de la Arquidiócesis de Xalapa; además son doce los seminaristas de la etapa de filosofía que estarán a partir de hoy, seis de junio, hasta el domingo 27 en esta parroquia, la cual está a cargo del presbítero Gonzalo Platas.


Cuando le preguntamos acerca de cuál era el principal objetivo de dicha misión, nos comentó que consistiría en promover las distintas vocaciones, además de dar a conocer y reafirmar la figura del sacerdote entre la población, y también el preparar un poco la próxima ordenación del diácono Artemio Domínguez Ruiz, oriundo de la comunidad de Tinajitas, perteneciente a dicha parroquia. Al mismo tiempo, agregó que la misión es una parte importante dentro de la formación sacerdotal, ya que se desarrolla en medio de una comunidad y en ella misma se comparte y se vive la fe.



El padre Juan Beristain dijo que son tres las comunidades que se visitarán en esta actividad formativa, Santa Rosa, Mozomboa y Tinajitas. Nos informó que la dinámica de esta misión se realizará de la siguiente manera: “En cada una de la comunidades se permanecerá una semana; se pretende realizar de lunes a viernes, un visiteo casa por casa, compartiendo, invitando, fortaleciendo la fe; brindar catequesis para niños, jóvenes y adultos; el fin de semana, en el día sábado, se realizará un retiro vocacional; en el día domingo, se pasarán los seminaristas otra comunidad designada. Además, algún sacerdote, del equipo formador, estará con ellos para escuhar, visitar, atender a los enfermos, convivir con la comunidad y por supuesto para la celebración de la eucaristía”.


Finalmente, el padre Juan Beristain envía un mensaje a toda aquella población de la parroquia de Mozomboa y comunidades: “Esperamos e invitamos a todas las personas para que nos acompañen y juntos, sacerdotes, seminaristas y comunidad, podamos valorar el gran don que Dios nos ha dado a través Jesucristo único y eterno sacerdote. Y así, podamos saber que no estamos solos sino que hay un sacerdote que es Jesucristo, quien acompaña nuestra vida, nuestro encuentro hacia Dios”.


Agradecemos la colaboración del padre Juan Beristain de los Santos por su valiosa disposición para esta entrevista, esperamos que esta misión que van a iniciar les sirva a quienes han de ser los futuros sacerdotes de esta Iglesia de Xalapa.





“Caín” de José Saramago


POR ARTEMIO DOMÍNGUEZ RUIZ


No todos los criterios humanos presentan cierta apertura para recibir cualquier cosa. Algunos suelen ser rígidos y escrupulosos. Otros cuadrados y llenos de ortodoxia. Sólo algunos espíritus libres son aquellos que reciben lo que se presenta y saben dónde acomodarlo, sin que esto cause el menor disturbio en su interior.




Para leer a “Caín” de José Saramago, se necesita, si se quiere llegar hasta el final de la obra, evitar toda serie de indignaciones y prejuicios, es decir, cierta libertad interpretativa. Ya que a veces es necesario escuchar otras opiniones que enriquecen nuestra manera de pensar.



En Caín, se puede identificar una cierta desilusión de la vida, la no aceptación de las culpas, el reproche, la frustración, la soledad y el menosprecio. Llama la atención algunos diálogos que este personaje mantiene con el “señor” (con minúscula, lo escribe el autor): “Es muy sencillo, maté a Abel porque no podía matarte a ti, pero en mi intención estás muerto”.


No queda aquí hacerla de defensores de Dios, donde éste no ha quedado muy bien parado. Ya Nietzsche lo había matado. Un análisis teológico perdería aquí su tiempo. Esto es sólo una visión más de los primeros libros de la Biblia, donde culpar a Dios de todas las desgracias humanas está a la orden del día.




Es que el mundo bíblico da para eso y para más. Cada quien se puede identificar, de acuerdo a su experiencia, con el personaje que quiera. Y, así, tomar las cosas desde esa perspectiva de vida.



Sin embargo, es justo decir que la obra, en cuanto a literatura se refiere, y así lo manifiestan algunos autores, “presenta una moderna y sorprendente prosa: que es capaz de hacer nueva una historia que se conoce de principio a fin”. Es una obra bien estructurada basada en la literalidad bíblica –de aquí la posible confusión– que cuestiona, desde un ángulo mordaz, el mismo gobierno de Dios. Cada uno elegirá darle o no su aprobación.




FOTO-NOTA:





LOS ALUMNOS del Seminario de Xalapa después de dos semanas de exámenes finales organizaron, el pasado sábado 29 de mayo, su paseo de fin de cursos. Debido al clima caluroso, la mayoría de los grupos escogieron lugares adecuados para refrescarse y pasar un rato agradable, visitaron las playas, algunos fueron a Carrizal, otros prefirieron el Tajín; en fin, todos aprovecharon de este momento de convivencia y descanso para recobrar fuerzas para lo que sigue. ¡Felicidades Seminaristas!



FRASE DE LA SEMANA:



“El futuro tiene muchos nombres. Para los débiles es lo inalcanzable. Para los temerosos, lo desconocido. Para los valientes una oportunidad”.















Víctor Hugo

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